Las pruebas diagnósticas son herramientas esenciales en la medicina para identificar, confirmar o descartar la presencia de una enfermedad, condición o patología en un paciente. Sin embargo, las esperas prolongadas para acceder a ellas, un problema general en los sistemas sanitarios, pueden tener efectos adversos en la salud del paciente.
La Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid publica cada mes los datos de listas y tiempos de esperas en consultas externas, intervenciones quirúrgicas y pruebas diagnósticas. Los dos primeros valores también se recogen a nivel estatal dos veces al año a través del informe del SISLE; sin embargo, no hay un registro a nivel nacional que contemple las demoras en la realización de pruebas.
El pasado abril, 198.994 madrileños se encontraban en lista de espera para que se les realizase a través del sistema público de salud una prueba diagnóstica, un 3,57% menos respecto a marzo, cuando el número de pacientes era de 206.357. Pese al descenso, la demora media en el ámbito de TACs, mamografías y otro tipo de pruebas subió en el último mes un día y se situó en 62,11 días.
Aún así, la amplia red de hospitales de la Comunidad de Madric hace que los valores cambien sensiblemente en función de cada centro. En el ámbito de pruebas diagnósticas ocho hospitales presentaron demoras medias por debajo de los 30 días. Se trata del Hospital Universitario de Torrejón, con 14,46 días; el Central de la Cruz Roja San José y Santa Adela, con 16,44 días; el Infanta Elena, con 19,24 días; el de Villalba, con 22,96 días; el Rey Juan Carlos, con 23,58 días; el Niño Jesús, con 23,89 días; la Fundación Jiménez Díaz, con 24,33 días; y el Puerta de Hierro Majadahonda, con 30,58 días. En el extremo opuesto de la clasificación, las demoras para pruebas diagnósticas se prolongaron más allá de los tres meses en el Infanta Sofía (103,63 días) y el Infanta Cristina (116,88 días) y llegaron a superar los 4 meses de espera en el Hospital Universitario del Sureste (130,29 días).
58 días de media para una ecografía
La ecografía, también conocida como ultrasonografía, es una prueba diagnóstica que utiliza ondas sonoras de alta frecuencia para crear imágenes de las estructuras internas del cuerpo. Ginecólogos, cardiólogos, urólogos, médicos de familia… son muchos los especialistas que utilizan esta prueba para sus diagnósticos y, en consecuencia, es habitual tener que esperar un tiempo para su realización.
A tenor de los valores publicados en abril, la espera de la Comunidad de Madrid para una ecografía rondó en torno a los 58 días de media. Sin embargo, las demoras variaron significativamente según los hospitales.
El Hospital Universitario General de Villalba, con 11,4 días de espera media, registró el tiempo más corto de toda la CAM para una ecografía. Le siguieron el de Torrejón (13,88 días) y el Infanta Elena (14 días). A poca distancia y todavía por debajo de los 20 días, se colocaron el Gregorio Marañón (15,31 días), el Central Cruz Roja San José y Santa Adela (16,34 días) y la Fundación Jiménez Díaz (18,81 días). Finalmente, el Rey Juan Carlos (20,83 días) y el pediátrico Niño Jesús (23,63 días), completaron la tabla para ecografías por debajo del mes.
Fueron varios los hospitales madrileños cuyas demoras medias para este tipo de prueba se situaron entre un y dos meses: el Puerta de Hierro Majadahonda (31,66 días), La Princesa (33,87 días), el 12 de Octubre (35,53 días), el de Getafe (59,29 días)... Pero también fueron varios los hospitales que superaron la barrera de los tres meses; La Paz (91,57 días), el de Henares (92,51 días), el Infanta Leonor (97,29 días). Las esperas más pronunciadas de la Comunidad de Madridpara realizar una ecografía tuvieron lugar en el Infanta Sofía, con cuatro meses (120,42 días); el Infanta Cristina, con casi cinco meses (140,7 días); y, por último, en el del Sureste, que 154,63 días de demora, fue el hospital con mayor retraso en la realización de este tipo de prueba diagnóstica.