El cierre de colegios por la pandemia de coronavirus, que obligó a millones de niños en todo el mundo a seguir las clases a través de una pantalla de ordenador y a perder horas al aire libre, ha provocado un incremento de los casos de miopía entre los menores, según un estudio publicado en el British Journal of Ophthalmology. 

La investigación, que se llevó a cabo entre 1.793 niños de 6 a 8 años, se centró en averiguar si los cambios de comportamiento y estilo de vida impuestos durante la pandemia podrían haber afectado a la visión de los menores. Un total de 709 pequeños fueron reclutados para el estudio al comienzo de la pandemia (de diciembre de 2019 a enero de 2020) y fueron monitoreados durante unos 8 meses, mientras que 1.084 niños habían entrado en el estudio antes del comienzo de virus y habían sido monitoreados durante unos 3 años, según adelanta la publicación, de la que se hace eco La Razón.

El estudio concluye que el cierre de colegios en más de 180 países, en septiembre de 2020, en un intento de controlar la extensión del coronavirus en la población, afectó a mil millones de alumnos, es decir, al 80% de los estudiantes del mundo. Los niños se han visto especialmente afectados, ya que se han restringido o prohibido las actividades al aire libre y se han limitado gravemente las relaciones sociales.

El peligro de la miopía en los niños

Según los investigadores, la miopía en los niños debe tenerse muy en cuenta porque les expone a desarrollar complicaciones que aumentan el riesgo de padecer ceguera o problemas de visión irreversibles en el futuro. La miopía consiste en una afección en la que cambia la forma del ojo, haciendo que los rayos de luz se refracten de forma incorrecta, enfocando las imágenes delante en lugar de en la superficie de la retina. S

Los especialistas midieron la agudeza visual –la capacidad de ver con claridad– y rellenaron cuestionarios sobre su estilo de vida, incluido el tiempo que pasaban al aire libre y en trabajos cercanos, al entrar en el estudio y durante las visitas clínicas posteriores.

Un total de 709 de los niños se sometieron al estudio al comienzo de la pandemia, de diciembre de 2019 a enero de 2020, fueron monitoreados durante unos 8 meses, mientras que 1.084 menores ya participaban en el estudio antes de la llegada del Covid-19 a nuestras vidas y habían sido monitoreados durante unos 3 años, según la investigación publicada en el British Journal of Ophthalmology.