La muerte el pasado viernes en Getafe del menor de 14 años por una sobredosis de cocaína rosa, también conocida como tusi, ha sobrecogido al municipio madrileño así como a toda la opinión pública por lo crudo del asunto. En un primer momento se contempló la hipótesis de que le hubieran envenenado echando unos dos gramos de este estupefaciente sin que lo supiera en una bebida energética que estaba bebiendo, lo que le causó la muerte. Pero ahora todo parece haber cambiado y podría haber sido él mismo, según la declaración de sus amigos.

No le envenenaron con tusi

Las últimas novedades sobre el caso del joven llamado Ryan que ha fallecido por consumir tusi han dado un vuelco al suceso. En un primer momento se sopesó que la droga, unos dos gramos de cocaína rosa, podría haber sido introducida sin que lo supiera por otros jóvenes en la lata de Red Bull que este se encontraba bebiendo, lo que le causó presuntamente una sobredosis. Cabe destacar que el uso de este producto, una mezcla de sustancias como la ketamina o éxtasis con tinte rosado, es "poco frecuente" entre los menores.

Relacionado Traición a Federico Jiménez Losantos: Luis del Pino, a la competencia

También se ha llegado a asegurar que existía un vídeo en las redes sociales -que después habría sido eliminado- en el que los chicos que supuestamente le drogaron se reían del menor y deslizaban su autoría. Ahora ninguna de estas cosas siguen encima de la mesa, hasta el punto de que ni siquiera se contempla que el fallecido haya sido obligado a consumir estos estupefacciones. De hecho, la Policía Nacional descarta la hipótesis del homicidio y valora que haya sido él mismo.

Fuentes policiales aseguran que ahora la investigación -en manos de la Policía Judicial de Getafe después de que el joven fuera hallado sin vida en la estación de metro de Los Espartales de este municipio madrileño- pivota entorno a conocer quién adquirió la cocaína y quién se la entregó al niño una vez ya se ha conocido que el propio menor la consumió por voluntad propia. La familia ha denunciado este hecho ante la Fiscalía de Menores, que también está implicado en las investigaciones.

La versión de sus amigos

Este giro se ha producido a raíz de la versión de los amigos que han dado en declaraciones a las autoridades tras lo ocurrido. Según las explicaciones de algunos jóvenes que se encontraban con la víctima, fue este mismo el que habría decidido consumir por voluntad propia la denominada cocaína rosa. Han asegurado que le vieron "cómo se tomaba la cocaína", negando también que fuera tusi, sino la normal blanca popularmente conocida. Además, hablan de que les dieron "mazo de coca".

Relacionado Alertan de una disminución de aves en Madrid Río tras la mascletà de Almeida

Tras esto, la Policía Nacional ha descartado que fuera víctima de un posible engaño, lo que conllevaría consecuencias penales más elevadas. Nadie le echó la droga en su bebida sin que él se diera cuenta. Tampoco tienen claro que la ingesta fuera a través de la lata del Red Bull, pero sí han descartado ya la teoría del homicidio a manos de otra u otras personas. Ha cobrado fuerza la hipótesis de que se tratara de algún tipo de apuesta o juego. Otros también han asegurado que todos sabían que estaban bebiendo una bebida con estas sustancias.

Lo que sí se sabe es que el chico, después de ingerir la cocaína rosa, se desmayó perdiendo el conocimiento a causa de una intoxicación por la ingesta dicha sustancia, lo que le causó la muerte. Hasta el lugar en el que sucedió, un barrio residencial de Getafe, acudieron sanitarios y agentes de la Policía Nacional, que avisaron a los padres de lo sucedido. El joven ha sido enterrado en la tarde de este lunes.

La familia niega que se drogara

Ahora los esfuerzos están puestos en dar con la persona que proporcionó el estupefaciente al menor, presuntamente dos gramos. Sin embargo, las autoridades no creen que consumiera toda esta cantidad dado que "algo así tumbaría a un caballo". Por su parte, la familia ha relatado que el joven salió de casa con unos 30 euros al tiempo que ha negado que él se pudiera haber drogado activamente. "No lo hizo nunca, tampoco ese día", han dicho.

El trágico suceso ocurrió en torno a las diez de la noche del viernes 16 de febrero. El menor había quedado con unos amigos en la zona de la estación de Metro de Espartales, en Getafe. Allí se reunieron con otros jóvenes a los que, al parecer, habían conocido por Instagram. En un momento dado el chico se desplomó y se golpeó en la barbilla contra el suelo, lo que le dejó inconsciente. El informe preliminar de la autopsia ha revelado que no murió por la caída, sino por la cocaína.

La Policía Nacional y la Local acudieron al lugar, donde intentaron reanimarlo sin éxito. Fueron los sanitarios del Summa-112 los que lo sacaron varias veces de las varias paradas cardiorrespiratorias que estaba sufriendo, hasta que no pudieron más que certificar su fallecimiento allí mismo. Uno de los aspectos que se va a tener en cuenta es si padecía alguna patología previa que acelerase ese desenlace tras consumir droga y sufrir una sobredosis.

 

Síguenos en Whatsapp y recibe las noticias destacadas y las historias más interesantes