El 'tusi' o 'tussi' es una droga de diseño que se consume habitualmente en nuestro país y que suele ser llamada erróneamente "cocaína rosa" ya que poco tiene que ver con la cocaína ni en composición ni en efectos, tan solo en el modo de consumo. Sin embargo, este es el nombre que le ha dado la Policía Nacional a esta sustancia, que ha vuelto a la actualidad por el fallecimiento de un menor en Getafe, después de consumir dos gramos junto a la bebida energética que estaba tomando.
¿Por qué se llama 'tusi'?
Su nombre proviene de su composición química: 4-bromo-2,5-dimetoxifeniletilamina, abreviado 2CB que en inglés sería two c b, pronunciado "tusibi". Pertenece a la familia de las feniletilaminas, cuyo principal efecto es el alucinógeno.
Se trata de una sustancia relativamente nueva, fue sintetizada en 1974 por Alexander 'Sasha' Shulgin, un químico farmacéutico, considerado “un alquimista moderno” que promovió las drogas psicoactivas sintetizando más de 200 sustancias que alteran la mente, entre ellas el famoso MDMA.
El uso del 2CB o 'tusi' se empezó a popularizar tras ilegalizarse en 1985 en Estados Unidos el éxtasis (MDMA), introduciéndose en la escena de los clubs nocturnos y las raves.
Se puede consumir en cápsulas o en polvos, de manera oral o esnifada, siendo esta última forma la favorita entre los jóvenes en España. Los efectos que genera duran de cuatro a seis horas si se toman varias dosis de entre 15 y 30 mg cada una. Suele provocar "subidones y bajones" hasta que finalmente se pasa el efecto.
Según el creador, es una droga psicodélica sin el efecto analgésico de los psicodélicos, esa sedación típica del LSD o las setas alucinógenas. Puede generar alucinaciones, aunque estas sean menos intensas que las que provoca el LSD. Sus efectos se equiparan a una combinación de la euforia que produce el éxtasis en pastillas y las distorsiones de la realidad propias del LSD.
A pesar de la constante comparación con el MDMA, el nivel de dependencia que genera el 'tusi' es potencialmente mucho más peligroso. Asimismo, sus efectos a medio plazo afectan gravemente la salud mental: pasando por episodios de pánico ataques de ansiedad, depresión, alteraciones emocionales y despersonalización.
Consumo de 'tusi' o cocaína rosa en España
Como ocurre con otros estupefacientes, el 'tusi' en España no se comercializa puro, de hecho es más bien al revés: el porcentaje de sustancia original 2CB encontrada en los "polvos rosas" es menor que el de otras drogas como la Ketamina, el MDMA y las anfetaminas. También es habitual encontrar colorantes, esencias de vaporizadores y algunos saborizantes y tintas de pastelería al analizar una muestra.
La manera de consumir esta droga de diseño en nuestro país es esnifada como la cocaína. Y se trata de una sustancia muy cara, costando entre 90 y 100 euros el gramo. Para entender cómo de encarecido está el precio del 'tusi', la cocaína se vende en España a 60 euros el gramo. Por lo que es evidente que el 2CB solo pueden consumirlo personas de alto nivel adquisitivo.
Imagen conseguida por ElPlural.com de un 'chivato' de 'tusi'
Desde la experiencia propia: ¿cuáles son sus efectos?
Dos consumidores esporádicos de 2CB que prefieren mantenerse en el anonimato han dado testimonio a ElPlural.com, explicando cómo ha sido para ellos probar esta sustancia.
Pablo (nombre ficticio) comenta que ha visto dos clases de polvos: "Hay naranja y rosa fosforito". Además, señala que tal y cómo le explicó quien "le invitó" esa noche, "es una mezcla entre pastilla y keta, aunque también lleva LSD según tengo entendido". Asegura haberse sentido desubicado: "Estuve un rato que ni sabía dónde estaba" y alerta con respecto a probar demasiada cantidad: "La primera vez fui muy de valiente y me pegó tanto con una sola raya que la segunda vez me lo pensé".
Preguntado sobre dónde puede encontrarse el 'tusi', contesta que es habitual en "discotecas y raves", pero recalca que los jóvenes siguen consumiendo "más lo de siempre", refiriéndose a otras drogas, porque son más asequibles. "Se lo pone la gente que se mueve por discotecas de mayores (más de 25 años) y que tiene pasta" concluye.
Por su parte, Jorge (nombre ficticio), insiste en que el 'tusi' que se vende en nuestro país "es más parecido a la keta, porque la base es keta", tal y como explicamos en párrafos anteriores. "Lo que pasa es que luego se le echan muchas más cosas que hace que el efecto sea distinto y algo más suave" aclara.
"Contiene tantas sustancias distintas que pasas por bastantes fases" y asemeja "la volada" con la que produce el éxtasis, "pero también con alucinaciones a veces" que no son muy exageradas, resumiendo que sintió una "pequeña distorsión de la realidad".
Jorge (nombre ficticio) aconseja tener cierto control sobre el consumo ya que "los efectos se incrementan con el alcohol". Además, recomienda "no pasarse" para poder "disfrutar de manera controlada de la sensación de levitar" que genera la ketamina.
Los efectos se pasan más rápidamente que los de las pastillas de éxtasis: "Dura una media hora". "Cuando vas así pierdes la noción del tiempo", añade. Con respecto a las alucinaciones o distorsiones que experimentas con el 2CB, este consumidor anónimo asegura que "te vas, pero vuelves razonadamente rápido. No se pasa mal".
"Antes se movía más por Ibiza, pero ahora ya está en todos lados" comenta. Y añade que "aunque es una droga de ricos" si "estás enganchado y tienes 100 euros te lo vas a gastar igual en eso aunque no tengas para comer".
Hasta donde él conoce, la mayoría de los consumidores esporádicos de drogas suele preferir el 'tusi' solo en ocasiones muy puntuales. "Es para días especiales, no para todos los findes", sentencia.
