La ola de calor que sacue a la Península ha teñido de alertas naranjas el país. Extremadura ya ha tomado medidas para proteger a los jóvenes. Numerosos colegios se han acogido a la legislación de mayo del 2021 para reducir el horario lectivo y permitir a las familias recoger a sus hijos e hijas a partir de las 12:00 horas. Una iniciativa que es voluntaria, pero que ha inspirado a otras regiones.

En este sentido, Más Madrid ha urgido a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, a tomar medidas. La portavoz adjunta y portavoz de Educación de MM en la Asamblea, María Pastor, ha registrado esta mañana unas preguntas dirigidas a la Consejería de Educación para conocer las actuaciones que está llevando a cabo en los centros educativos ante la ola de calor que se está viviendo estos días, siendo la más temprana de los últimos 47 años y que prevé una temperatura máxima de 40 grados.

Desde Más Madrid preguntan al Gobierno si los centros educativos están preparados para hacer frente a las altas temperaturas y por las medidas adoptadas para rehabilitar energéticamente los centros educativos.

“Ante la ola de calor que estamos viviendo queremos conocer qué ha hecho el Gobierno para mitigar sus efectos en los centros educativos y proteger así la salud de población vulnerable como son los niños y niñas. El negacionismo del PP pone en riesgo nuestra salud y nuestro futuro. Lo que necesitamos no es eliminar la crisis climática de los libros de texto sino un compromiso valiente para eliminar la crisis climática de nuestras vidas y mitigar sus efectos. Es urgente medidas que nos protejan ante estos episodios y que garanticen la salud del alumnado y docentes”, ha afirmado la diputada y portavoz adjunta, María Pastor.

En el Pleno de la Asamblea de Madrid del pasado jueves se debatió la propuesta presentada por Más Madrid de habilitar refugios climáticos para combatir el calor, tal como están haciendo ciudades como Barcelona, Sevilla, Vitoria o Málaga en bibliotecas, centros de estudio o colegios. La propuesta fue rechazada con los votos en contra de Partido Popular y Vox.