El Gobierno de España decretó el estado de alarma a fin y efecto de contener el coronavirus. A esta decisión le ha seguido un paquete de medidas restrictivas con el mismo objetivo. Sin embargo, hasta dentro de una o dos semanas las indicaciones no tendrán su efecto en las cifras, que siguen subiendo. En estos momentos, en España hay casi 8.000 contagiados y 300 muertos. Buena parte de los infectados y de los fallecidos se han registrado en la Comunidad de Madrid, que se ha convertido en la Wuhan de España.

Cuando comenzó el brote en China, Wuhan hacía las veces de epicentro de lo que luego fue la pandemia. La ciudad echó el cierre y sus ciudadanos se confinaron, pretendiendo así poner cerco al coronavirus.

Ahora, la Comunidad de Madrid vive una situación parecida. En la región hay ya 3.544 contagiados y 213 fallecidos, unas cifras notablemente más altas que la segunda comunidad autónoma con mayores cotas.

Cataluña ha registrado 903 casos de contagio y 12 muertes; mientras que el País Vasco tiene 630, de los cuales han fallecido 22.

La situación es tal que el ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos, ha asegurado este lunes que el estado de alarma decretado por el Gobierno se extenderá más allá de los 15 días exigidos en la ley porque, a su juicio, estas dos semanas no darán a España la "capacidad para ganar la batalla" contra el coronavirus.

Una de las primeras recomendaciones, ahora ya rubricadas mediante un decreto ley, fue pedir a las ciudadanos madrileños que no viajaran ni al exterior ni a otras comunidades autónomas por el elevado riesgo de propagar el virus.