El Ayuntamiento de Madrid ha liberado a los restaurantes y bares de la burocracia necesaria para la instalación de mamparas móviles en terrazas a fin y efecto de agilizar los trámites para que los hosteleros puedan salvar parte de la campaña. Así lo ha acordado la Comisión de Terrazas de la capital, que ya había hecho lo propio para el uso de estufas.

La resolución entra en vigor este jueves para posibilitar que los negocios continúen funcionando pese a las restricciones implementadas con motivo del coronavirus.

El objetivo es hacer frente al frío y la lluvia, según ha apuntado la vicealcaldesa, Begoña Villacís: “La hostelería madrileña está siendo un ejemplo de profesionalidad y responsabilidad. La situación es muy complicada, pero estamos a vuestro lado. Hemos flexibilizado la normativa de terrazas, agilizado la implantación de estufas y habrá bonificaciones en el IBI e IAE para 2021”.

Las mamparas, eso sí, no podrán estar ancladas en el pavimento ni tener más de tres laterales, por lo que no está permitido el cierre total y deben siempre dejar paso para los peatones. Asimismo, tampoco se podrá instalar estructuras que limiten la visibilidad. Podrán ser de jardinería (maceteros o jardineras) y, según la resolución, es posible combinarlos con elementos ensamblados de estructura metálica o de madera, ya sea en el lateral o con toldo en la parte superior. Podrán disponer de pies para facilitar su movilidad y estar hechos de vidrio u otros materiales como sintéticos o textiles.