La paridad tiene que llegar a todas partes, desde luego también a los órganos de gobierno y a los legislativos. Bajo este convencimiento, el grupo parlamentario socialista en el Congreso de los Diputados hemos presentado una iniciativa para garantizar la representación paritaria en los órganos y nombramientos del Congreso de los Diputados. La iniciativa se aprobó este jueves, 22 de febrero, en la comisión de Igualdad del Congreso, a pesar de la abstención del PP y Ciudadanos.

La reforma de la Constitución, que debemos emprender sin demora, debe blindar la presencia paritaria de mujeres y hombres en la composición de los órganos del Estado. Partíamos de sólo 27 diputadas en la Legislatura constituyente. Mujeres que, además, la historia ha invisibilizado. Hoy en día, el parlamento español es más igualitario de lo que era entonces, desde luego. Pero no es suficiente con tener igual o parecido número de diputadas que de diputados. Se trata también de que ellas y ellos tengan las mismas cuotas de poder, para tener igual capacidad de decisión. Y eso, en las cámaras de representantes, se visualiza y se hace efectivo a través de la mayor o menor presencia en mesas y en portavocías.

Hace ya casi once años, la Ley Orgánica 3/2007, de 22 de marzo para la Igualdad efectiva de mujeres y hombres, marcó el camino a seguir. La reforma de la Constitución ya llegará, confiamos en que sea más pronto que tarde. Pero de momento planteamos que la cámara baja adquiera un compromiso con la paridad. Queremos que se haga efectiva la igualdad entre hombres y mujeres en la elección tanto de la Mesa de la Cámara como de sus comisiones, así como en otros nombramientos que correspondan a la Cámara o a algunos de sus órganos ( Defensor del Pueblo, miembros del Tribunal Constitucional, del Consejo General del Poder Judicial, del Tribunal de Cuentas y otros organismos) Y que sea un compromiso perdurable, reglamentado, independientemente de quién ostente la mayoría en cada momento.

En territorios gobernados por el partido socialista, ese compromiso ya se ha hecho efectivo: en les Corts Valencianes, en Andalucía o en Extremadura. El ejemplo de Les Corts valencianas es muy ilustrativo: Hace ya dos años aprobaron la reforma de su Reglamento. La reforma contempla que para la elección de la Mesa, así como de las mesas de las comisiones, se siga un mecanismo en la presentación de candidaturas que garantice una composición paritaria con mecanismos correctivos para que ningún sexo esté sobrerrepresentado.

Más recientemente, el pasado mes de noviembre, Les Corts Valencianes aprobaron la  Ley 12/2017, de 2 de novembre, de la Generalitat, de modificación de las leyes reguladoras de las instituciones de la Generalitat para garantizar la igualdad entre  mujeres y hombres en sus órganos.  A partir de su entrada en vigor, todas las entidades y organismos, como la patronal o los sindicatos, que propongan personas para la composición de esos órganos deben respetar la paridad. La ley, que afecta también a las renovaciones parciales de Instituciones comisionadas por las Cortes y de las consultivas de la Generalitat, modifica otras leyes que regulan esos órganos estatutarios, para garantizar la paridad. Por ejemplo, en el caso del Comité Económico y Social, la Academia Valenciana de la Lengua o el Síndic de Greuges.

Hoy el Congreso cuenta con 13 mujeres presidentas de comisión y 22 hombres presidentes. Tenemos que continuar avanzando y afianzar los progresos con la inclusión en la reforma del Reglamento del Congreso de fórmulas que bien podrían aproximarse a la solución implementada en Valencia pero que, sean cuales sean, deben garantizar la justa y necesaria paridad.

*Lidia Guinart es periodista, escritora y, actualmente, diputada del grupo socialista en el Congreso.