El verano se ha estrenado con tormentas a lo largo y ancho del mapa, siendo La Rioja una de las comunidades más afectadas, con lluvias que alcanzaron los 50 litros por metro cuadrado. Esto ha provocado que se decrete el nivel 1 de protección civil.

Los municipios más afectados han sido Uruñuela y Huércanos. En este segundo los vecinos habían alertado de la desaparición de un hombre de 60 años que después fue localizado en el domicilio de un amigo en perfecto estado de salud. Ya entrada la noche, las calles se convirtieron en ríos caudalosos.

Por su parte, en la primera localidad pasó factura principalmente el desbordamiento del río Yalde, que imposibilitó el pasado miércoles la actuación de los bomberos. Asimismo, el canal del margen derecho del río Najerilla se desbordó y varias de las localidades quedaron reducidas a agua y barro.

Además de estas dos, se vieron afectadas por las intensas tormentas las zonas de La Rioja Baja, con la crecida del río Alhama, la zona sur de Logroño y Lardero, así como Navarrete, Fuenmayor, Alesón, Ventosa y Cenicero.

Desde la delegación de Gobierno explican que, a pesar de las incidencias, las principales redes de comunicación están ya limpias, aunque predomina la circulación lenta en la LR-113 entre PK 70 y 76.

Inicio de verano convulso

Alrededor de las 21:30 horas se desató en buena parte del mapa la tormenta que dio el pistoletazo de salida a la época estival y que dejó consecuencias en buena parte del mapa. Pero si el foco de queda puesto en La Rioja, en muchas de las ciudades la cantidad de agua acumulada fue tal que tardó horas en volver a la normalidad.

De hecho, Logroño fue uno de los puntos más perjudicados con el paso de los minutos. Aquí el agua dejó consecuencias principalmente en la calle Clavijo, todo un clásico cuando se producen tormentas veraniegas. En este enclave, un joven de 20 años quedó atrapado con su vehículo particular, al que el agua cubría casi en su totalidad. Afortunadamente, pudo salir por su propio pie.

No obstante, el temporal pasó factura por toda la región, de manera que en carreteras autonómicas se han registrado múltiples incidencias en el tráfico y varios vehículos quedaron atrapados por la subida del agua. Algunos ejemplos de ello son las carreteras N-232 en Torremontalbo; las carreteras LR-284 y LR-390 en Aguilar de Río Alhama, la N-120 al paso por Alesón, la LR-113 en Uruñuela, la LR-137 y la A-12 a la altura de Navarrete; la LR-211 en Cenicero y la LR-113 en Arenzana de Abajo. La tormenta dejó también calles inundadas en Huércanos, Uruñuela, Ventosa, Alesón, Nájera, Cenicero y Fuenmayor.

Llega la calma

El riesgo por lluvias y tormentas se limitará este jueves al extremo noreste peninsular, según la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) que espera que durante la jornada de este jueves se instale el tiempo seco y estable y de comienzo un aumento de las temperaturas, que se mantendrá en ascendencia con el paso de las horas, especialmente el fin de semana.

En concreto, tendrán aviso amarillo por lluvias que pueden acumular de 15 a 20 litros por metro cuadrado las provincias de Guipúzcoa, Navarra, Huesca, y Gerona, mientras que tendrán riesgo todavía por tormentas, además de estas, también Tarragona.

A lo largo del día se producirán chubascos y tormentas localmente fuertes en el Cantábrico oriental y en el norte de Navarra y habrá chubascos no tan fuertes y más ocasionales en gran parte del Cantábrico, Pirineos, alto Ebro, norte de Aragón y Cataluña.

Asimismo, se esperan algunos chubascos y tormentas en el este de Cataluña aunque la nubosidad y las precipitaciones irán disminuyendo en todas las zonas a lo largo del día.

En el resto de la mitad norte y en Baleares se espera nubosidad de evolución mientras en el resto de la Península la tónica general serán los cielos poco nubosos.

La AEMET espera que en Canarias predominarán los intervalos nubosos en el norte de las islas y con alguna nubosidad de evolución dispersa en el interior de islas montañosas. También habrá calimas en el área mediterránea y sobre todo en Baleares.

Las temperaturas máximas subirán excepto en el cuadrante nordeste peninsular y Baleares, donde permanecerán con pocos cambios o ligeros descensos. Por su parte, las nocturnas descenderán.

Finalmente, los vientos soplarán de norte en la mitad norte peninsular, con cierzo en el Ebro y noroeste en el Cantábrico oriental y en Baleares. Poniente en el Estrecho y Alborán rolando a levante al final. En Canarias, el viento llegará del noreste.