La donación de médula ósea es un acto de solidaridad que puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte para miles de personas en todo el mundo. En España, esta noble acción se lleva a cabo de manera voluntaria, anónima y altruista. Cualquier persona inscrita como donante de médula ósea ha de estar dispuesta a dar progenitores hematopoyéticos, también conocidos como células madre de la sangre, a cualquier individuo, sin importar el lugar del mundo donde esté tratándose la enfermedad. En este artículo, exploraremos a fondo el proceso de donación de médula ósea en España, desde la inscripción en el Registro de Donantes de Médula Ósea (REDMO), hasta el impacto positivo que tiene esta acción en la vida de los pacientes.

Cada año, en España, aproximadamente 6.400 personas son diagnosticadas con leucemia. Para muchas de ellas, la única esperanza de superar esta devastadora enfermedad es someterse a un trasplante de médula ósea. Sorprendentemente, tres de cada cuatro pacientes no tienen un familiar compatible que pueda donarle células madre. En estos casos, la única opción viable será buscar un donante que esté dispuesto a compartir este regalo de vida.

¿Qué es el trasplante de médula ósea?

El trasplante de médula ósea es una técnica médica que consiste en reemplazar las células sanguíneas enfermas de un paciente con células madre sanas de un donante. Esta intervención ha demostrado ser la única esperanza para muchos afectados de leucemia y otras enfermedades graves de la sangre, como el linfoma, la anemia aplásica, la talasemia mayor y el síndrome mielodisplásico, entre otras. Estas afecciones pueden afectar gravemente la producción de células sanguíneas, vitales para el correcto funcionamiento del cuerpo humano, siendo el trasplante de médula la única posibilidad de curación. Sin embargo, es importante destacar que cada caso es único y que la decisión de realizar un trasplante se toma después de una evaluación exhaustiva del paciente.

Lo primero: infórmate bien

El primer paso para convertirse en donante de médula ósea es informarse adecuadamente. La donación de médula ósea es un acto altruista y generoso que puede salvar vidas, pero también es un gran compromiso. Para tomar la decisión de convertirse en donante, es fundamental comprender completamente el proceso y las implicaciones. La Guía del Donante de la Fundación Josep Carreras contra la leucemia proporciona toda la información detallada que ha servido de referencia para realizar este artículo.

Lo que SÍ es la donación de médula ósea

  • Ofrecer de manera anónima y desinteresada tu ayuda a pacientes de todo el mundo que la necesiten.
  • Representa un compromiso tanto contigo mismo como con los demás.
  • Es la única forma de donación que se puede realizar en vida y en la que las células que donas se regeneran completamente.
  • Puede ser la única esperanza de curación para cientos de personas necesitadas.
  • Es un acto que literalmente otorga vida.

Lo que NO es la donación de médula ósea

  • No está relacionada con la médula espinal ni sus nervios, sino con la médula ósea, donde se generan las células madre de la sangre. 
  • No es una intervención quirúrgica que elimine tu médula ósea, ya que esta se regenera por completo.
  • No te impide donar en el futuro si un familiar tuyo lo requiere, puedes donar varias veces.
  • No te inscribes como donante exclusivo de una persona, sino puedes donar a cualquier persona en el mundo que necesite tu ayuda.
  • No presenta ningún peligro para el donante.

¿Quiénes pueden ser donantes?

Tradicionalmente, se ha dicho que cualquier persona de entre 18 y 55 años con buena salud podía ser un donante voluntario de médula ósea. No obstante, en la actualidad se da prioridad a la calidad sobre la cantidad de donantes. Además, la probabilidad de éxito en un trasplante está estrechamente relacionada con la edad del donante. Por lo tanto, se ha establecido un límite máximo de edad para registrar nuevos donantes, que es de 40 años. Una vez registrado, un donante puede permanecer en el registro hasta los 60 años, que es la edad máxima aceptada para realizar una donación efectiva. Es esencial que cualquier candidato consulte su situación particular antes de inscribirse como donante, ya que existen otros factores que pueden dificultar la donación.

Inscríbete como donante

Cuando una persona cumple con los requisitos para ser donante de médula ósea y ha adquirido el conocimiento necesario sobre el proceso, puede proceder a la inscripción. Para hacerlo, tendrá que contactar con el centro de donantes correspondiente según el domicilio del interesado. Los datos de contacto de estos centros se pueden encontrar en el sitio web de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT) o a través de la Fundación Josep Carreras. 

Durante la inscripción normalmente se lleva a cabo una extracción de sangre, similar a una analítica normal, y la firma de un consentimiento informado. Después de unas semanas, el donante recibirá una confirmación de registro por SMS o correo electrónico. A partir de ese momento, el donante estará disponible para cualquier búsqueda de donantes que se inicie en cualquier parte del mundo. 

¿Qué pasa cuando eres compatible?

Si un donante registrado resulta ser compatible con un paciente que necesita un trasplante de médula ósea, se llevarán a cabo una serie de procedimientos. Primero, el donante será contactado por la Fundación Josep Carreras-REDMO o el centro de referencia de donantes para confirmar su disposición a donar. Si el donante está dispuesto, se realizará un extenso cuestionario médico y se evaluará su disponibilidad para la donación en los meses siguientes.

¿Qué pruebas hay que hacerse antes de donar?

Para poder realizar la donación de médula ósea es preciso realizar diversos estudios complementarios para garantizar la seguridad tanto del donante como del receptor. Estos estudios pueden incluir una radiografía de tórax, un electrocardiograma y otra analítica más completa. Además, se realizará una revisión médica completa para determinar si el donante puede llevar a cabo la donación sin riesgos significativos.

¿Cómo se realiza la donación?

La donación puede ser de sangre periférica o de médula ósea, y este será un proceso crucial en el que el donante jugará un papel fundamental en la vida de un paciente. A continuación se explican cómo se llevan a cabo ambos tipos de donación:

Donación de sangre periférica

La donación de sangre periférica se realiza mediante un procedimiento llamado aféresis. En este proceso, se extrae la sangre del donante a través de una vena de un brazo. La sangre se procesa en una máquina especializada que separa las células madre de la sangre. El resto de la sangre, sin las células madre, se devuelve al donante a través de una vena del otro brazo.

Este procedimiento suele durar unas entre 4 y 6 horas y se realiza con el donante cómodamente recostado en una cama. Es importante destacar que con un solo procedimiento de aféresis es posible obtener tantas o más células madre que con una extracción de médula ósea. En casos donde se necesiten muchas células, como cuando hay una gran diferencia de peso entre el donante y el receptor o cuando la primera recolección es insuficiente, el proceso puede repetirse al día siguiente. La donación de sangre periférica generalmente se realiza de forma ambulatoria, y solo en casos excepcionales que requieran un catéter, se consideraría un ingreso hospitalario para mayor comodidad del donante. 

Donación de sangre medular

La extracción de la sangre medular es un procedimiento que se lleva a cabo en un quirófano y sigue rigurosas medidas de asepsia, como cualquier otra intervención quirúrgica. El donante se somete a anestesia general o epidural para evitar cualquier molestia o dolor durante el procedimiento. A continuación, el donante se coloca en posición decúbito prono (boca abajo) sobre la mesa de operaciones.

Luego, se procede a desinfectar la piel que cubre las crestas ilíacas posteriores, que son prominencias óseas ubicadas en la parte postero-superior de la pelvis. Dos miembros del equipo extractor, uno a cada lado de la mesa de operaciones, realizan punciones en estas crestas ilíacas utilizando agujas especialmente diseñadas. Cada punción permite la extracción de aproximadamente 5 ml de sangre medular, que contiene las valiosas células madre. Estas células se recogen en una bolsa que contiene sustancias para evitar la coagulación de la sangre.

Cabe destacar que este tipo de donación es mucho menos común que la aféresis en la actualidad y solo será necesario realizar el procedimiento en casos muy concretos.

¿Por qué es importante donar médula ósea?

La donación de médula ósea es un acto de generosidad que puede marcar una gran diferencia en la vida de las personas que luchan contra enfermedades graves de la sangre. La leucemia, el linfoma y la anemia aplásica, entre otras afecciones, pueden afectar gravemente la producción de células sanguíneas y poner en grave peligro la vida de los pacientes. En muchos casos, un trasplante de médula ósea es la única esperanza de curación.

Sin embargo, encontrar un donante compatible puede ser un desafío, especialmente para personas de ciertos grupos étnicos. Por lo tanto, es fundamental contar con un amplio número de donantes registrados en los bancos de médula ósea para aumentar las posibilidades de encontrar un donante compatible y, de esta manera, conseguir salvar vidas.

La donación de médula ósea en España se basa en la solidaridad internacional y el compromiso de las personas dispuestas a dar esperanza y vida a quienes más lo necesitan. Cualquier persona en buen estado de salud y dentro de los límites de edad establecidos puede convertirse en un donante voluntario de médula ósea.

La donación de médula ósea es un compromiso altruista que puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte para miles de personas en todo el mundo. Al inscribirse como donante de médula ósea, uno se convierte en un héroe anónimo que brinda la oportunidad de una nueva vida a aquellos que más lo necesitan.

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