Como cada 5 de agosto, Ceuta se vuelve a paralizar en honor a su patrona, la Virgen de Nuestra Señora África, quien saldrá en una procesión con el escudo de Franco bordado en su manto y el lema franquista Una, grande y libre.
Para sorpresa, el acto cuenta con el respaldo de la mayoría de partidos políticos de la región, y también de una importante parte de la sociedad. "Son tradiciones de toda la vida", decían hace unos años a 'El Español'. Asimismo, también apuntaban a la historia de Ceuta: "Es una ciudad muy ligada a la cultura militar".
Por el momento, la Cofradía no tiene intención de cambiar este ritual, aunque han señalado que si los políticos les obligan a quitar estos detalles franquistas, amparándose en la Ley de Memoria Histórica, ellos lo harán.
