"Hoy a Ferraz, mañana a la Moncloa". Este ha sido uno de los cánticos que se han escuchado durante la manifestación de este jueves en la calle Ferraz, donde miles de simpatizantes de derecha y extrema derecha se han agolpado para protestar contra la amnistía de los políticos del 'procés' independentista. Un cántico que deja clara la intención de los citados: llevar a cabo una concentración similar a la de estos días, pero en lugar de tener la sede socialista como epicentro, en el Palacio de la Moncloa, residencia oficial del presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez.

Las manifestaciones de esta semana, aunque en teoría nacen para protestar con la amnistía, han girado rápidamente hacia tintes más radicales y se han escuchado proclamas ajenas a la ley que liberaría de cargos criminales a Puigdemont y compañía. Desde el viernes, no han parado de sucederse los 'Que te vote Txapote', 'Marlaska maricón', 'Sánchez, maricón, que te vote Puigdemont', 'Con los moros no tenéis cojones' o el 'Cara al sol', premisas que poco tienen que ver con la amnistía. Huelga decir que las protestas de este miércoles han sido más pacíficas que la del resto de la semana, sin disturbios reseñables y sin una presencia masiva de neonazis, como sí ocurrió en días anteriores, al menos hasta las 22:00 horas.

A su vez, la derecha, comúnmente afín y defensora de la figura del rey de España, también ha tenido palabras contra el jefe del Estado. 'Felipe, masón, defiende la nación', se ha podido escuchar en algunos momentos de la concentración. En este sentido, ElPlural.com también informó este martes de banderas de España con el símbolo de la Corona recortado, en señal de protesta por la postura del monarca, que no ha sido otra que la de proponer a Pedro Sánchez como candidato a la investidura y mantenerse al margen de toda polémica política.

Cánticos contra el líder del PP

Por otra parte, el líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, tampoco se ha librado de las críticas y de los cánticos de los manifestantes. "¡Dónde está el gallego del PP!", han proferido cientos de personas, reprochando su ausencia en las concentraciones. 

Destacar que Feijóo condenó los actos violentos en las protestas contra la amnistía, pero lo hizo a medias: a la vez que "condenaba todo tipo de violencia", aprovechó para cargar contra los socialistas, lanzado una suerte de condena a medias con doble mensaje. "Hemos oído a miembros del partido de Sánchez decir que quien no condena la violencia la alienta. Tienen razón pero deberían aplicárselo. Ellos pretenden amnistiar la violencia, y cuando pretendes amnistiarla no puedes dar ningún ejemplo ni lección a los que condenamos la violencia. En un lado están los que cometen o amnistían actos violentos y antidemocráticos, y de otro los que condenamos lo uno y lo otro. fin del cuento. no hay más divisiones que esta", ha sostenido, afeando la violencia pero hilándola con su denuncia al socialismo.

Sánchez manda una carta a la militancia socialista

A raíz de los tensos episodios vividos durante los últimos días, el secretario general del PSOE y presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, ha enviado una carta a la militancia socialista.

En la misiva, el líder socialista califica los hechos como "inaceptables, provocados por la frustración de una ultraderecha que convoca y una derecha que mira para otro lado". Y con la misiva, lo que Sánchez pretende es trasladar un "mensaje de solidaridad y cariño", y también de "agradecimiento" hacia todos los militantes del Partido Socialista".

Frente a estas violentas protestas, Sánchez ha remarcado la importancia de volver a formar un gobierno estable de coalición progresista: "Un gobierno que siga actuando desde la razón y la defensa de los principios de convivencia, libertad y democracia que reclama y comparte la inmensa mayoría de la sociedad española".

"Lo que está ocurriendo son hechos inaceptables, provocados por la frustración de una ultraderecha que convoca y una derecha que mira para otro lado, cuando no justifica. El pasado 23 de julio, los españoles dijeron no a un gobierno de PP y Vox; y dijeron sí a cuatro años más de progreso y convivencia. Ese fue el mandato de las urnas. Un mandato cuestionado por quienes se niegan a aceptar los resultados electorales cuando no son de su agrado", reza el escrito del jefe del Ejecutivo en funciones.

"No es un hecho aislado. Lo hemos visto recientemente en otras democracias del mundo y no sólo en Europa. También en países como Estados Unidos, Brasil o, más recientemente, Argentina. Episodios lamentables de una derecha tradicional que acaba devorada por los sectores más ultras, como está ocurriendo en España. Unos con sus actos, y otros con su silencio cómplice, son responsables de un ataque dirigido no sólo contra el PSOE. Sino contra la democracia y la Constitución que dicen defender y que no dejan de violentar", expone también.