El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha pedido este miércoles al presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, abrir "una negociación seria" para lograr apoyos suficientes y un gobierno estable, pero le ha advertido de que "entre los aliados potenciales" no están los socialistas.
Así, Sánchez subraya que, a día de hoy, el PSOE se ratifica en su voto negativo a la investidura de Rajoy. Sánchez ha transmitido este mensaje en una rueda de prensa en el Congreso al término de la reunión mantenida con Rajoy, que se ha prolongado alrededor de una hora y cuarto.
El líder socialista ha hecho ver a Rajoy que el diálogo sobre el que tiene que construir una mayoría "se tiene que basar en propuestas y no en amenazas y chantajes".
"Nosotros no tenemos nada que negociar con el señor Rajoy. Dialogar, todo", ha dicho Sánchez asegurando que harán todo lo posible para evitar que los ciudadanos tengan que acudir a las urnas una tercera vez desde el pasado 20D, aunque sin abrir la puerta a una abstención, como sí ha hecho Ciudadanos. "Si hay un riesgo de terceras elecciones es porque ha habido segundas elecciones. El PSOE fue el que más hizo para que no las hubiera", ha recordado Sánchez tras defender la "autonomía política" de su proyecto.
Según ha explicado, Sánchez ha hecho ver a Rajoy que la investidura y la gobernabilidad "van de la mano" y que "una cosa no puede ser sin la otra". Por ello, ha subrayado que el PP, con sus 137 escaños, tiene "la obligación y la responsabilidad" de buscar una mayoría suficiente que le reporte estabilidad.
El PP sigue solo
"A día de hoy, de 137 a 176 escaños, le queda un trecho que recorrer en el cual no puede contar con el PSOE", le ha advertido Sánchez al PP.
Para alcanzar el listón de la mayoría absoluta, el secretario general del PSOE ha apuntado que Rajoy tiene "mucho campo para hablar", por lo que le ha requerido "esforzarse, trabajar y negociar a fondo con sus aliados potenciales", entre los que ha incluido a los independentistas catalanes y ha excluido a los socialistas.
A Sánchez le parece preocupante que dos semanas después de las elecciones, Rajoy no haya obtenido el respaldo de ningún otro grupo, por lo que le ha animado a abrir una negociación "seria" basada "en propuestas y no en amenazas y chantajes".
¿Intentará ser investido?
Tras reiterar que su voluntad en la nueva legislatura es hacer una oposición "útil y constructiva", Sánchez no ha despejado del todo la posibilidad de intentar de nuevo una investidura, como ya hizo en febrero.
"El PSOE siempre estará en la solución. Los tiempos en democracia hay que respetarlos. Es el tiempo de Rajoy, que ha ganado las elecciones, y le corresponde hacer lo que hicieron otros líderes políticos de izquierda y derecha durante la democracia, que es articular mayorías suficientes para garantizar un gobierno estable", ha remarcado. "Por tanto, no es que nos excluyamos", ha completado el secretario general, que ha rechazado las "lecciones" del líder de Podemos, Pablo Iglesias, por decir que, si el PSOE se abstiene ante Rajoy, pasará a ser su "socio".
Ante la incertidumbre social por cómo desbloquear el gobierno, Sánchez ha transmitido un mensaje de confianza en la ciudadanía y ha prometido que el PSOE "va a dar lo mejor de sí mismo" para desatascar el problema, para lo cual ha recomendado "diálogo, negociación y capacidad de acuerdo".
