La templanza parece estar brillando por su ausencia en estos días en el seno del Partido Popular. El presidente de la formación, Alberto Núñez Feijóo, se ha desvinculado este jueves del acuerdo para la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), que lleva ya un largo tiempo atascada y que fue suscrito en otoño del 2021 por el entonces secretario general del partido, Teodoro García Egea. Esta decisión ha sido tomada por Feijóo, según ha podido informar el diario El País, porque “no tenía el texto del acuerdo” y porque su antecesor, Pablo Casado, no le entregó “ningún documento al respecto” durante el traspaso de poderes.
Feijóo ha alegado que su predecesor no le entregó "ningún documento" al respecto durante el traspaso de poderes. “Nosotros no lo tenemos [el documento]. […] Creo que se pactó una lista, eso es lo que me han dicho. Nada más”, expresaba el presidente de la formación neoliberal al medio mencionado. "Cuando despaché con Casado, en el traspaso de poderes, no me dio ningún documento ni acuerdo relacionado con el tema", añadía también en otras declaraciones, dejando claro su desacuerdo con la decisión tomada por el partido en el momento de la firma del acuerdo y su desconocimiento de esta, al no haber recibido noticias de Casado.
Pese a las tensiones… portavocías, secretarías y sobresueldos
A pesar de que Feijóo ha hecho hincapié en su desaprobación de la decisión tomada por el núcleo duro de Casado (y en su ignorancia de la misma), esto no ha impedido que Cuca Gamarra y Teodoro García Egea, las dos personas de mayor confianza de Pablo Casado, se beneficien de los cambios de la estructura interna del partido. En primer lugar, Gamarra fue nombrada en abril de 2022 como secretaria general del partido, ocupando el cargo que anteriormente ostentaba Teodoro García Egea.
En segundo lugar, el propio Egea ha sido nombrado presidente de la Comisión sobre Seguridad Vial del Congreso de los Diputados, con un sobresueldo de 1.551,58 euros. García Egea llega a este puesto en la Cámara Baja apenas cinco meses después de la dura crisis interna que afectó al PP y que terminó con el liderazgo de Pablo Casado, que dejó su escaño en el Congreso. Sin embargo, el otrora secretario general del partido decidió mantener su acta de diputado. Por último, Javier Maroto ha mantenido su puesto como portavoz del Grupo Parlamentario Popular en el Senado, a pesar de estar también fuertemente ligado a Casado.
De esta manera, se aprecian ciertas incongruencias entre la línea discursiva tomada por Alberto Núñez Feijóo, quien ha optado por desvincularse de Casado, su séquito y las decisiones tomadas por el mismo en su momento, y en las directrices tomadas desde de la cúpula superior del partido, otorgando puestos cargados de polémica a los miembros de este mismo grupo y reflejando unas tiranteces internas con pocos precedentes.
