El Partido Popular ha esgrimido las desavenencias entre la vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos, Nadie Calviño, con la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, para censurar la descoordinación del Gobierno. Durante la sesión de control celebrada este miércoles, cita en la que no ha estado presente Pedro Sánchez con motivo de su intervención ante la Asamblea de la ONU, Cuca Gamarra ha vertido una terna de preguntas cortas sobre decisiones del Ejecutivo con las que Calviño no siempre ha estado de acuerdo. Sin embargo, la ministra socialista ha garantizado que todos reman en la misma dirección y ha afeado la oposición de la bancada popular a todo lo que huela a PSOE.

“Nos pretenden acostumbrar a sus peleas internas y a que un Gobierno se siente con Bildu”, ha comenzado al portavoz parlamentaria del PP. Gamarra ha afirmado que Calviño es “continuamente desautorizada, corregida y relegada por el ala populista del Gobierno”, que “prima la política del día a día, la improvisación frente a los acontecimientos, el regate corto”. Así las cosas, ha preguntado por “cómo valora su coordinación de la política económica”.

La respuesta de Calviño ha sido breve y concisa: “Llevamos tres años con una política coherente. Llevan ustedes tres años intentando atacarnos con el mismo tipo de argumentos que, francamente, no se sostienen”. “Cambien su actitud negativa y empiecen a ayudar en la recuperación pensando en el bienestar de los españoles”, ha instado la ministra.

Calviño: "En su bancada solo hay bronca, crispación y energía negativa"

En este punto, Cuca Gamarra ha lanzado varias cuestiones rápidas que, a su juicio, muestran las costuras del Ejecutivo: “Si coordina la política económica, despeje algunas dudas. ¿Apoya usted la aplicación retroactiva de la subida del SMI? ¿La derogación de la reforma laboral? Para usted, coordinar es sembrar un campo de minas de inseguridad”.

Por su parte, Calviño ha concluido que la política económica “es conocida, respetada y genera confianza” tanto en “nuestros socios como en los inversores internacionales”. Expuesta su postura y dando la pregunta por respondida, la ministra ha pasado a la ofensiva denunciando que los de Pablo Casado “se oponen a todo”: “A la renovación del CGPJ, a la subida del SMI, a la mejora de los servicios públicos y, ya lo ultimo, se oponen a bajar el precio de la energía”.

“El futuro no está escrito y nos vamos a enfrentar a retos muy importantes. Pero para resolverlos no sirve su actitud. En su bancada solo hay bronca, crispación y energía negativa”, ha zanjado.