La secretaria general de Podemos y ministra de Derechos Sociales en funciones, Ione Belarra, se ha sumado a más de ochenta representantes mundiales para dirigir un escrito al fiscal de la Corte Penal Internacional, Karim Ahmad Khan, donde solicitan la detención del primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, y que sea juzgado, junto a miembros de su Gobierno y a varios colaboradores, por crímenes de guerra, lesa humanidad y genocidio contra el pueblo Palestino. 

Al escrito se ha sumado el histórico dirigente laborista y diputado británico, Jeremy Corbyn; el secretario general del Partido de los Trabajadores de Bélgica, Peter Mertens, y hasta 80 representantes de una veintena de países europeos y de América Latina entre los que se encuentra la ministra de Igualdad en funciones, Irene Montero, el portavoz de ERC, Gabriel Rufián, diputados de la formación morada y representantes del BNG, IU y de Anticapitalistas.

La petición, formulada al amparo del artículo 15 del Estatuto de Roma, solicita a la Corte que amplíe la investigación que inició en 2021 contra Israel por crímenes de guerra a la luz de los hechos ocurridos desde el pasado 7 de octubre, entre los que destacan ataques a campos de refugiados, el uso de fósforo blanco o el bombardeo contra el hospital de Al-Ahli. Además, el escrito aporta documentación para dar respuesta a la solicitud de apoyo formulada por Khan el pasado 29 de octubre, cuando visitó el paso fronterizo de Rafah (Egipto) y pidió “cooperación” y “asistencia” a la comunidad internacional para hacer que se respete el derecho internacional en la zona.

En palabras de Belarra, que desde el inicio de la ofensiva destacó como la primera ministra europea en denunciar los crímenes de Israel, hay que “pasar a la acción” contra este “genocidio en directo” para “promover un alto el fuego y que termine esta barbarie, porque la barbarie, si no la detienes a tiempo, te arrastra con ella”. “No vamos a permitir un genocidio con nuestro silencio y nuestra complicidad”, ha subrayado en una declaración difundida este martes desde la sede de Podemos, donde anima a toda la ciudadanía a apoyar con su firma, en la página justiceforgaza.info, esta iniciativa judicial dirigida a acabar con la impunidad de Israel.

En concreto, los firmantes del escrito piden a la Corte Penal Internacional que se investigue a Netanyahu y su gobierno por crímenes de genocidio, descritos en el artículo 6 del Estatuto de Roma como aquellos encaminados a la destrucción total o parcial de “un grupo nacional, étnico, racial o religioso”; crímenes de lesa humanidad, previstos en el artículo 7 del Estatuto de Roma, por tratarse de un ataque sistemático y generalizado contra la población civil de Gaza que produce una "persecución de un grupo o colectividad fundada en motivos políticos, raciales, nacionales, étnicos, culturales, religiosos (...)" y crímenes de guerra, tipificados en el artículo 8 del Estatuto de Roma como aquellos que incluyen el "homicidio intencional”, “dirigir ataques contra bienes civiles” o el traslado por parte de una potencia ocupante de parte de la población civil.

Críticas a Sánchez

El coportavoz de Podemos, Pablo Fernández, denunciaba este lunes que la "inacción y la pasividad de la comunidad internacional y de la Unión Europea está siendo vergonzosa y penosa".

A juicio de Fernández, España y Europa "tienen que hacer mucho más" y ha criticado que "especialmente penoso" está siendo el papel de Sánchez y el PSOE, dado que ostenta la Presidencia del Consejo de Europa y no puede "quedarse impasible ante un genocidio de tamaña magnitud" con el pueblo palestino.

El dirigente de Podemos reiteraba en rueda de prensa la necesidad de romper relaciones diplomáticas con Israel y que España deje de comprar armas a este país, entre otras medidas que aislen al país que lleva bombardeando Gaza desde el 7 de octubre tras el ataque de Hamás.

Finalmente, y con motivo de la manifestación este sábado en solidaridad con el pueblo sahararui, Fernández volvía a criticar el "giro" del PSOE en la pasada legislatura al avalar el plan de autonomía en la zona planteado por Rabat, lo que a su juicio es plegarse a los "chantajes" de Marruecos.

Al respecto, reivindicaba que el debate de España es "promover y alentar" le derecho de autodeterminación del pueblo saharaui, dado que a ojos de la ONU sigue siendo potencia admistradora.