El pasado jueves el consejero de Salud, Jesús Aguirre,  acompañado del portavoz del gobierno regional, Elías Bendodo, anunciaban para sorpresa y perplejidad de muchos que desde ese día, la Junta de Andalucía no informará a diario de la evolución de los brotes de coronavirus que se detectan en la comunidad, tal y como venía haciendo hasta el momento. Sin dar más explicación sobre esa polémica decisión salvo que más de la mitad de los brotes son familiares, sin duda se trata de un acuerdo difícil de entender por el escenario de rebrotes que se viven y que crecen a diario. Ambos consejeros explicaron que informarán sobre los brotes únicamente una vez a la semana.

Como situación excepcional que haría que rompieran puntualmente esta nueva norma se llevará a cabo si detectase algún brote de carácter "epidemiológicamente significativo". En ese caso sí se incluiría en el comunicado diario sobre la evolución de la pandemia, que señala los positivos confirmados por PCR y los casos acumulados de contagios, hospitalizaciones, ingresos en UCI, fallecimientos y alta y curaciones.

Semiapagón informativo cuando más se demandan datos

Este cambio de criterio se produce tras la última reunión para el seguimiento de los rebrotes y cuando la comunidad, según los datos publicados este miércoles, alcanzaba los 123 focos activos que sumaban 1.290 contagios. Es paradójico, por tanto, que en con este escenario susceptible de empeorar según distintas informaciones científicas y con la polémica apertura del curso en ciernes y la vuelta de vacaciones, el Gobierno andaluz decrete este semiapagón informativo cuando más demanda de datos necesitan las personas.


El mayor aumento desde el 5 de abril

Los últimos datos de ayer jueves Andalucía registraron  422 nuevos casos de coronavirus Covid-19 confirmados por PCR -el mayor aumento desde el 5 de abril- con dos fallecidos en 24 horas, según los datos acumulados publicados por el Instituto de Estadística y Cartografía de Andalucía, que contabiliza también 23 nuevos hospitalizados, uno de ellos en una Unidad de Cuidados Intensivos (UCI).
La expresidenta de la Junta de Andalucía, la socialista Susana Díaz, ha censurado esta decisión en redes sociales con el siguiente tuit: