La proximidad de las elecciones autonómicas (26 de mayo), las encuestas adversas y la seria amenaza de VOX de hacer un destrozo al PP castellano-manchego, ha llevado a sus líderes a echar mano de lo que sea para intentar erosionar la imagen del líder socialista y actual presidente del Gobierno de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page. Y para conseguir sus propósitos se remiten a un viaje oficial realizado hace un año por Page a Chicago para asistir a un congreso sanitario, aludiendo  “incumplimiento de la normativa de transparencia y buen gobierno”, supuestas “infracciones” que serán recogidas en su petición para la celebración de un debate en las Cortes autonómicas.

Para la secretaria general del Grupo Parlamentario Popular en las Cortes, Ana Guarinos, el viaje oficial de García-Page, acompañado por otras tres personas más, incluido el consejero de Sanidad, es “un viaje de placer y no tiene nada que ver con la agenda oficial”, dice, para posteriormente censurar la falta de formación sanitaria del presidente manchego, que es licenciado en Derecho.Se gastó  el dinero en un viaje con la excusa de participar en un congreso especializado de radiología, cuando no es que no sea experto en radiología, es que ni siquiera es médico”, asegura, como si los políticos tuvieran que ser todos ellos arquitectos, médicos, pilotos de aviación, ingenieros, cocineros, camareros, taxistas, conductores de trenes, aparejadores, obispos, cardenales… para asistir a congresos o ferias en busca de alternativas, soluciones o ideas para aplicar en sus respectivos territorios.

Por su parte, la portavoz del PSOE en Castilla-La Mancha, Cristina Maestre, señala a ELPLURAL.COM que “muy mal tienen que estar los dirigentes del PP de nuestra región para que estén inventándose noticias falsas”. Este viaje, añade la portavoz socialista, “no solo estuvo plenamente justificado sino que sobre el mismo se ha ofrecido toda la información”. En este sentido, explica que el viaje ha contribuido a que “se pueda disponer de una mejor tecnología sanitaria con la que está siendo posible avanzar en la detección precoz de graves enfermedades”. Y como dato importante subraya, “que durante este año se han detectado 600 enfermedades muy graves que estaban asintomáticas en pacientes de nuestra comunidad autónoma”, para finalmente asegurar que “invertir en aparatos más punteros y eficientes para mejorar la vida de los ciudadanos es la manera de hacer política que tenemos los socialistas;  mientras que la de los dirigentes del PP de la región, es la de engañar, mentir y enredar”.

López del Hierro viajaba con Cospedal

Hasta aquí, la lógica parlamentaria entre partidos políticos, pero cuando se hacen acusaciones tan graves como la realizada por Guarinos, entonces, los medios de comunicación estamos obligados a tirar de hemeroteca y recordar a los políticos sus distintas varas de medir. Decimos esto porque el PP guardó atronador silencio cuando siendo María Dolores de Cospedal presidenta de Castilla-La Mancha viajó a la City londinense con una nutrida delegación, acompañada por su esposo, Ignacio López del Hierro, que nada tenía que ver con su Gobierno y, sin embargo, estuvo en todas las reuniones que la también exministra de Defensa mantuvo en la capital inglesa, como quedó reflejado en las imágenes difundidas por TVE, que cubrió la visita de Cospedal como si del mismísimo Mariano Rajoy se hubiera tratado.

En aquel invierno de 2013, la oposición se preguntó ¿quién pago el billete del empresario? ¿Y el hotel? ¿Y los demás gastos? ¿Desde cuándo los consortes de los presidentes/as autonómicos acompañan a sus parejas en los viajes oficiales? Han transcurrido cinco años e Ignacio López del Hierro no ha aportado las facturas que acrediten que abonó de su bolsillo los gastos referidos, ni tampoco el PP dio las explicaciones debidas sobre este “viaje oficial” del siempre controvertido esposo de Cospedal.

Lo que sí sabemos es que Cospedal y su marido, además de los consejeros de Hacienda y Economía y Trabajo de 2013, y sus respectivas delegaciones, mantuvieron reuniones con destacados fondos buitres como  “Blackrock”, “Schroders Investment” o “Western Asset Management”. Reunión que coincide en el tiempo con la operación llevada a cabo por la alcaldesa popular de Madrid ese mismo año, Ana Botella, que vendió a “Fidere”, filial de “Blackstone” (creada por socios de “Blackrock”), 1.860 viviendas públicas gestionadas en ese momento por el gobierno municipal del PP por 130 millones de euros, un precio bajísimo y lejos de lo fijado por el mercado, que llevó a estos fondos buitres a incrementar los alquileres y desahuciar a todos aquellos inquilinos que no pudieron pagar la brutal e inhumana subida.

Y también sabemos que el esposo de la hoy repudiada exsecretaria general del PP no era la primera vez que viajaba de forma poco ortodoxa, como cuando en agosto de 2017 participó en el crucero de cuatro días que el buque escuela de la Armada  Juan Sebastián Elcano realizó entre los puertos de Marín (Pontevedra) y Cádiz el pasado mes de julio. Y todo con dinero público.