La cumbre que reúne a los líderes de la Unión Europea (UE) en Granada cuenta con múltiples derivadas. Del encuentro informal de los mandatarios ha emanado la decisión de emprender una política migratoria más dura y restrictiva o la situación de la guerra de Ucrania, entre otras cosas. Sin embargo, un aspecto que también se ha abordado es el relativo a las posibles nuevas adhesiones de países que, aunque todavía fuera de la Unión, ya solicitaron la entrada hace tiempo, algunos más de una década.

Este es el caso de Macedonia del Norte, candidato desde 2005, Montenegro (2010) o Serbia (2012). A las exrepúblicas yugoslavas se le suman otros países como Albania, Turquía o, quizás el que más de actualidad está, Ucrania. Los principales problemas que se presentan se centran en la situación política y económica de estos países, a lo que se suma la inestabilidad internacional que atraviesa el continente. La democratización de las instituciones nacionales, la lucha contra la corrupción o los enfrentamientos étnico-culturales son asignaturas pendientes de estos Estados.

Esta diversidad y diferenciación entre los diferentes candidatos obligan a la UE a desarrollar un plan específico y reposado que garantice que cualquier nuevo miembro se integre de forma correcta. Para ello, se requiere un "enfoque a medida" puesto que "hay diez candidatos y cada uno necesita un enfoque específico", ha defendido el Alto Representante de la UE para Política Exterior, Josep Borrell. Lo cierto es que los Veintisiete no tenían ninguna prisa en sumar a los países balcánicos, pero la aspiración de añadir a Ucrania cuanto antes ha acelerado también el proceso de territorios que llevan décadas esperando.

El primer ministro de Finlandia, Petteri Orpo, considera la ampliación comunitaria una “necesidad geopolítica” y ha llamado al desarrollo de un proceso “abierto y claro” que garantice que todos los aspirantes cumplan los criterios establecidos. Por otro lado, el canciller alemán, Olaf Scholz, ha defendido la necesidad de cambiar las reglas de toma de decisión para que en materia de política exterior o fiscal puedan adoptarse por mayoría cualificada y no por unanimidad como hasta ahora.

Problemática ucraniana

El proceso de adhesión se dilata habitualmente en el tiempo, pero la realidad geopolítica está acelerando el proceso. El agravio comparativo entre Ucrania, un país en plena guerra y con la economía destrozada, y otros Estados que llevan muchos años esperando está servido. Uno de los más críticos es el ultraderechista Viktor Orbán, presidente de Hungría, que ha señalado la “fatiga de ampliación” que están sufriendo muchos líderes europeos.

El mandatario húngaro es, en sus propias palabras, un “gran promotor” de la adhesión de Georgia y ha tildado de “injusto” que no se den más pasos con este país. Además, ha dejado claro que la suma de Ucrania a la Unión le genera “muchas dudas” por ser un “país en guerra”. "Nunca ha habido una ampliación con un país en guerra. Es difícil, hay muchas preguntas, debemos tener una discusión estratégica", ha añadido el mandatario.

Alexander de Croo, primer ministro belga, ha avisado también de que la UE "no está lista" para sumar tantos nuevos socios como aspirantes hay hasta que el bloque no modifique su "manera de gestionar y de tomar decisiones". "Una ampliación de la UE sólo puede darse si es beneficioso para esos países pero también para nosotros. Puede ser un beneficio económico, de seguridad, pero a día de hoy no estamos preparados", ha remachado De Croo.

En la misma línea, buscando evitar precipitarse, el mandatario irlandés, Leo Varadkar, ha defendido "ser honestos y realistas" sobre los tiempos que requiere cada proceso de incorporación porque es un camino que lleva "años" y no debe tener atajos.

Criterios para la entrada a la UE:

El Tratado de la UE referido a las nuevas incorporaciones establece que cualquier país europeo puede solicitar la adhesión si “respeta los valores democráticos de la UE y se compromete a promoverlos”. Los criterios definidos específicamente en el Consejo Europeo de Copenhague de 1993 son los siguientes.

  • Instituciones estables que garanticen la democracia, el Estado de Derecho, los derechos humanos y el respeto y la protección de las minorías;
  • Una economía de mercado que funcione y la capacidad de hacer frente a la competencia y las fuerzas del mercado en la UE;
  • La capacidad de asumir y cumplir eficazmente las obligaciones de adhesión, incluida la adhesión a los objetivos de la unión política, económica y monetaria.

Países candidatos

En este momento, ochos países se postulan para ser candidatos y dos más son considerados candidatos potenciales, denominación utilizada para aquellos que todavía no cumplen los requisitos de la UE:

  • Albania
  • Bosnia y Herzegovina
  • Moldavia
  • Montenegro
  • Macedonia del Norte
  • Serbia
  • Turquía
  • Ucrania
  • Georgia (potencial)
  • Kosovo (potencial)