Sin ningún avance en casi tres meses de guerra y replegado de Kiev, el Gobierno ruso centra la propaganda en medios de comunicación en justificar que su presidente, Vladimir Putin, invada Ucrania. Las estrellas más mediáticas del país están llevando cada noche - durante el horario de máxima audiencia - al extremo para cargar contra los que se oponen a la "operación militar especial".

"O perdemos en Ucrania o empieza la Tercera Guerra Mundial. Me parece más probable que todo termine en un ataque nuclear que rendirnos", ha llegado a asegurar en Rusia Today, la televisión pública del país, su redactora jefe, Margarita Simonyan.

En los debates y tertulias de la televisión se culpa a Occidente de haber iniciado el conflicto: "Nos han declarado la guerra, ¿qué va a pasar ahora?", indican. "Tenemos que desmilitarizar la OTAN", apuntan otras voces. "Los representantes de esos 40 países (OTAN) forman un Hitler colectivo", añadía el mismo contertulio un momento después.

La propaganda se centra incluso en alentar otros ataques contra naciones como Reino Unido: "Las islas británicas no saben lo que dicen". "La isla es tan pequeña que bastaría un misil 'Sarmat' para hundirla fulminantemente para siempre", afimaba.

No es el único que piensa así en Rusia: un diputado de la Duma habla de un ataque nuclear fulminante en toda Europa: "Un ataque con armamento táctico es posible", indicaba. Cuando el presentador le interpelaba afirmando que eso supondría destuir todo el continente, parecía importarle poco. "Nunca digas nunca", contestaba.

Rusia afirma que tiene bastantes compradores de gas

El ministro de Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov, ha asegurado este miércoles que el país euroasiático tiene "suficientes compradores" de recursos energéticos "incluso sin los países occidentales", en el marco del posible embargo al petróleo ruso que discute la Unión Europea (UE) como represalia a la invasión de Ucrania.

Lavrov ha garantizado que las autoridades rusas "trabajarán" con estos compradores y ha advertido de que dejarán que "Occidente pague mucho más de lo que paga a Rusia" por los recursos energéticos que tendría que comprar a otros países.

"Dejaremos que explique a su población por qué van a empobrecerse más", ha agregado en rueda de prensa, según ha recogido la agencia de noticias rusa Interfax.

El Alto Representante de la UE para Política Exterior, Josep Borrell, reconoció el martes "dificultades" para cerrar un acuerdo sobre el sexto paquete de sanciones contra Rusia por la invasión de Ucrania que incluya el veto a la importación de petróleo ruso, aunque señaló al próximo lunes para culminar la ronda de sanciones.

Hungría mantiene sus reservas sobre la idea de imponer un veto al petróleo ruso y la propia presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, viajó este lunes a Budapest para tratar de desbloquear el sexto paquete de sanciones por la guerra en Ucrania.

Aunque valoró los progresos hechos, Von der Leyen señaló que se necesita más trabajo para cerrar el acuerdo final y prometió una videoconferencia con los actores regionales para cerrar filas.

La propuesta prevé un embargo a todas las importaciones de petróleo ruso a la Unión Europea por cualquier vía, con un periodo de transición de seis meses en el caso del crudo y de ocho para los productos refinados.

La excepción prevista para que Hungría y Eslovaquia pudieran retrasar un año su aplicación complicó las negociaciones porque el plazo resultaba insuficiente a ojos de estos países, que quieren retrasarlo hasta 2024, y porque otros socios pidieron ese trato diferenciado, algo que República Checa ha logrado ya consolidar en el texto para sí.