"Cada año, en este día, recordamos las vidas de todos los que murieron en el genocidio armenio de la era otomana y volvemos a comprometernos a evitar que esa atrocidad vuelva a ocurrir". Con estas palabras pasaba este sábado Joe Biden a la historia como el primer presidente de Estados Unidos en calificar como “genocidio” la matanza de aproximadamente un millón y medio de armenios entre 1915 y 1923 a manos de los otomanos.

Una declaración que coincidía con el Día del Recuerdo de Armenia, fecha en la que se conmemoró el 106 aniversario del inicio aquella masacre que es considerado el primer genocidio de la edad contemporánea y el segundo más estudiado, después del Holocausto judío. “Honramos su historia. Reconocemos su dolor. Afirmamos su historia. No repartimos culpa pero queremos asegurarnos de que lo que ha ocurrido no vuelve a pasar”, señalaba un comunicado emitido por la Casa Blanca.

“El pueblo estadounidense honra a todos los armenios que murieron en el genocidio que comenzó hoy hace 106 años. Mientras lloramos lo perdido, volvamos también nuestros ojos hacia el futuro, hacia el mundo que deseamos construir para nuestros hijos; un mundo sin mácula por los males cotidianos del fanatismo y la intolerancia, donde se respetan los derechos humanos y donde todas las personas pueden llevar su vida con dignidad y seguridad”, sentenciaba el comunicado.

Como se señalaba anteriormente, con esta declaración el dirigente demócrata se ha convertido en el primer presidente en la historia de EEUU en calificar las atrocidades cometidas contra los armenios como un genocidio. Anteriormente a Biden, tanto Ronald Reagan como Barack Obama habían anunciado su intención de hacer lo mismo, pero ambos acabaron incumpliendo su promesa tras recibir presiones de Turquía, estado sucesor del Imperio Otomano.

Asimismo, en el año 2019 el Congreso y el Senado estadounidense aprobaron tildar de “genocidio” esa matanza. Sin embargo, Donald Trump hizo prevalecer su buena relación con el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, y no tomó en consideración las resoluciones de las dos Cámaras del legislativo de EEUU.

Aliyev habla de "error histórico"

Como era fácil de prever, las reacciones de Turquía al anuncio de Biden no se han hecho esperar. Pocas horas después del comunicado, miembros del ejecutivo de Erdogán –este todavía no se ha pronunciado- condenaban duramente las palabras del dirigente norteamericano. En este sentido, el presidente de Azerbaiyán (aliado de Turquía), Ilham Aliyev, ha calificado la declaración de “falsa" y de un "error histórico" así como ha señalado que este hecho es "inaceptable".

Ya este domingo, el gobierno turco ha convocado en señal de protesta al embajador de Estados Unidos en el país, David Satterfield. Al mismo tiempo, la Embajada y los consulados de EEUU en Turquía, han anunciado que permanecerán cerrados el lunes y el martes como "medida de precaución" ante posibles protestas.

"Como medida de precaución, el lunes 26 y martes 27 de abril cerrarán la embajada de EEUU en Ankara, el consulado general de Estados Unidos en Estambul, el consulado en Adana y el consulado en Esmirna", según ha hecho saber por otro lado la Embajada norteamericana en una nota informativa.

Armenia agradece el reconocimiento

En la otra cara de la moneda, el primer ministro de Armenia, Nikol Pashinián, ha enviado una carta a Biden "expresando su gratitud por el reconocimiento oficial y la condena del genocidio armenio".

"El reconocimiento del genocidio armenio es posible no solo para rendir homenaje a los 1,5 millones de víctimas inocentes, sino también para prevenir la repetición de tales crímenes", se puede leer en la carta publicada en la web del primer ministro armenio.

"El reconocimiento del genocidio armenio por parte de Estados Unidos es un mensaje muy necesario para la comunidad internacional que reafirma la primacía de los Derechos Humanos y los valores en las relaciones internacionales", ha zanjado.

¿Quiénes reconocen el genocidio?

Desde este sábado, EEUU se ha sumado a la lista de más de 20 países (Argentina, Brasil, Bélgica, Canadá, Francia, Italia, Portugal, Rusia, Alemania…) que han reconocido formalmente el genocidio, pese a las presiones de Turquía. Una nómina de estados que inauguró en 1965 Uruguay.

Asimismo, también ha sido reconocido por el Vaticano, el Parlamento Europeo, el Consejo Mundial de Iglesias y otras instituciones. En este sentido, el papa Francisco llegó a asegurar que el armenio es el “primer genocidio del siglo XX”. Unas declaraciones que nuevamente levantaron ampollas en el gobierno turco, que llamó a consultas a su embajador en el Vaticano.