El juzgado de Instrucción nº5 de Estepona (Málaga) ve “indicios suficientes” para continuar el procedimiento de investigación a José María García Urbano, alcalde de Estepona por el Partido Popular, y C.P. en adelante (para guardar su anonimato), la mujer a la que contrató como personal eventual sin que “conste que realizara trabajo alguno”, según estipula el propio juez en el auto, por “malversación de caudales públicos”. A esto hay que sumarla a otra causa jurídica que también afecta al regidor y que apunta directamente a un posible uso indebido del poder público en beneficio de su entorno familiar, al conceder presuntamente un espacio municipal a una empresa vinculada a la pareja de su hijo.
Pero, más allá de estas dos causas judiciales, Urbano se vio envuelto en una causa de acoso sexual a un funcionario público, policía local, y a su mujer. Esta denuncia por presunto acoso, que fue archivada, se presentó por el marido de C.P.B, la mujer a la que Urbano contrató como asesora en el Ayuntamiento durante dos meses de 2023, sin realizar trabajo alguno, y, por lo que ahora estaría siendo acusado por malversación.
Acoso sexual archivado
En octubre de 2024, el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 5 de Estepona incoó diligencias previas por un presunto delito de acoso sexual contra el regidor. El denunciante, el marido de C.P, funcionario público, policía local aseguraba que el alcalde acosaba sexualmente a esta persona, reconociendo que “tuvo que acceder a las pretensiones sexuales del denunciado por miedo a perder su trabajo”. Asimismo, también advirtió que el primer edil le ofreció una ayuda de 2.000 euros mensuales y que contactaba con él “de forma insistente y a diario” para “seguir satisfaciendo sus deseos sexuales”, con él y con su pareja, C.P.
García Urbano reaccionó entonces con un comunicado en el aseguraba que se trataba de una "denuncia falsa" y parte de una supuesta campaña para dañar su imagen. El Juez finalmente archivó la denuncia. No obstante, en este procedimiento, el juez recaba información de las relaciones sexuales entre los implicados.
Así relata el Juez, en el auto de archivo, al que ha tenido acceso ElPlural.com, los encuentros sexuales entre ambos: “Tras el visionado del vídeo aportado por” el denunciante, “en el que se ve al mismo junto al investigado, tampoco se infiere una situación de dominación, miedo o coacción y se produce una llamada telefónica durante el acto sexual entre los dos en la que aparece la voz de una mujer que pudiera ser” C.P, “a tenor de la conversación de Whatsapp mantenida entre la misma y José María G. Urbano, el día 13 de junio de 2022”.
“13/6/22: José María le pregunta a C.P: “Quieres que vaya a comérsela a él? Te llamamos y tú por teléfono vas dando instrucciones”.
“17/6/22: C.P le dice a José María: “Mi cachorro está allí esperándote, desnudo mmm… quiero que le comas la polla, los huevos, hazle disfrutar”. Son las aportaciones del juez.
Otra conversación:
“27/11/2021: José María le dice que tiene ganas de comerle la polla a su marido a lo que ella responde, entre otras cosas, que para la semana que viene algo preparará”. Este texto se corresponde a un resumen del visionado realizado por el juez de instrucción.
“5/4/2022: C.P dice que se le antojó que José María fuera comerle la polla” al denunciante “a lo que accede y hablan sobre horarios para ello pero finalmente no pueden quedar. Ella sigue diciendo: “Prefieres que te de yo por detrás mientras comes polla… o prefieres que te de él mientras me comes, esas son las opciones”.
Estas conversaciones, aportadas por el Juez, sirvieron para archivar la denuncia contra Urbano por acoso, al detectar el juez que “no existió coacción”. Por otro lado, en el mismo proceso judicial, fue precisamente cuando el propio juez abre otra causa judicial, la de malversación, después de que la mujer reconociera que fue contratada en el Ayuntamiento durante unos meses sin ir a trabajar.
Malversación
Tal y como pudo comprobar este digital, el juez ha decidido continuar con la investigación por malversación debido a que la relación entre Urbano y C.P se trataba de una amistad “íntima”. Los hechos se remontan a, mínimo, enero 2022, desde donde hay registros que Urbano pagó un total de 21.000 € a la mujer hasta enero de 2023 en concepto de alquiler de una vivienda en Estepona. A partir de esta fecha sería cuando Urbano deja de pagar el alquiler y la contrata como personal de confianza en el Consistorio de Estepona, del que la mujer cobraría hasta 5.276 euros netos, entre el 13 de febrero y el 31 de marzo.
Lo más notorio es que mientras que la mujer estaba contratada en el Ayuntamiento de Estepona, para un trabajo que no ha quedado aún claro, dado que las versiones ofrecidas por el alcalde y el Delegado del Área de Control Externo del Ayuntamiento, difieren de las supuestas funciones, la mujer se encontraría en Córdoba de postoperatorio, superando una cirugía de pechos que se realizó el 22 de febrero de 2023, 9 días después de ser contratada. El alcalde, mientras tanto, mantenía conversaciones a través de WhatsApps con esta mujer, tal y como consta en los archivos judiciales a los que ha accedido este periódico, por lo que era totalmente consciente de lo que estaba ocurriendo.
El Consistorio lo niega
Desde el Ayuntamiento aseguran a este periódico que la prórroga de la instrucción es necesaria para que el alcalde se pueda defender y presentar pruebas de una acusación falsa de una presunta malversación derivada de la contratación de una persona como cargo de confianza -en el periodo de febrero a marzo de 2023- en el Ayuntamiento de Estepona.
Paralelamente, el regidor defiende que la Justicia ha dado la razón con el archivo definitivo por parte de la Audiencia Provincial de la denuncia que esa misma persona realizó por el supuesto caso de acoso citado.. Así, la Audiencia Provincial de Málaga ha confirmado la falsedad de su relato y que, por tanto, el alcalde ha sido "víctima" de una denuncia falsa por parte de esa persona.
La defensa del alcalde insiste en la falsedad de las declaraciones de dicha persona, que también está investigada en este procedimiento, y defiende que no existe ningún delito ni irregularidad en ninguna de las contrataciones que se han llevado a cabo por parte del Ayuntamiento de Estepona desde que José María García Urbano es alcalde. Se trata, según asegura, de una una "inadmisible e injusta campaña política y mediática" con el único objetivo "de dañar la dignidad y trayectoria política" del alcalde de Estepona.