El comisario Villarejo todavía tiene mucho de qué hablar. Según publica este sábado el diario El País, el policía tiene a su disposición tres copias de seguridad de varios discos duros donde tiene grabaciones con jueces, fiscales, políticos, periodistas y empresarias.
En la detención de Villarejo en el marco del caso Tándem, en el mes de noviembre del año pasado, la Unidad de Asuntos Internos de la Policía Nacional recabó una copia de estos audios. Sin embargo, los agentes no han podido hacer nada con esta información, puesto que se encuentra protegida con un algoritmo.
El magistrado Diego de Egea, el instructor del caso Tándem, ha pedido en reiteradas ocasiones a Villarejo que facilite las contraseñas a los investigadores para liberar los datos. Pero siempre se ha encontrado la misma respuesta: la negativa del comisario. Ante esta situación, el juez ha encargado al Instituto Nacional de Ciberseguridad de España (INCIBE) que analicen los discos duros e intenten liberarlos.
De Incibe cabe decir que es un organismo radicado en León y que depende del Ministerio de Economía y Empresa. Anteriormente, se le conocía como Instituto Nacional de Tecnologías de la Comunicación (INTECO) y su cometido fundamental es el de "construir ciberseguridad a nivel nacional e internacional". Se trata de una institución que nació en el año 2006 gracias al entonces alcalde de León, Francisco Fernández, y que dio vida el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero.
No obstante, su utilidad, que ahora no admite dudas, no siempre estuvo fuera de toda duda. El Partido Popular alegó que este centro en realidad era una "agencia de colocación" del PSOE, e incluso amenazó con cerrarlo. Finalmente, no fue así y ahora en sus manos está que Villarejo siga chantajeando desde la prisión con estas grabaciones que podrían "sacudir los cimientos del Estado".
