Segunda moción de censura en el Consejo de los Diputados y sin la participación del líder del Partido Popular Alberto Núñez Feijóo. La agenda de Feijóo no incluye el pleno en el que se debatirá la moción de Ramón Tamames como candidato al Ejecutivo, en su lugar, incorpora una reunión con embajadores de la Unión Europea en la Embajada de Suecia en Madrid a puerta cerrada.

La decisión de la cúpula del PP ha provocado la reacción de sus compañeros de Pleno, aunque ya se podían prever las intenciones del partido de Feijóo con sus calificativos sobre la moción como “circo”, “show” o “espectáculo”. El anuncio de Génova ya ha suscitado varias opiniones en sus compañeros de Congreso, entre ellos, el ministro de Cultura y Deporte, Miquel Iceta, que preguntado, tras los medios de comunicación a su entrada, ha respondido con sorna a lo ocurrido.

“Perdona, hoy Feijóo me parece que se hace el sueco, dicen que está en la Embajada sueca”, ha dicho el ministro tras soltar unas risas, mientras entraba al hemiciclo para la moción, según ha recogido el programa de Paula del Fraile en La Sexta. A lo que la presentadora ha añadido que “un poquito bromita tipo Maspons, porque está Feijóo en la Embajada de Suecia a las 9.30 horas”, ha dicho en referencia al periodista Sebas Maspons y sus refranes.

La abstención de Génova

Iceta ya dejaba clara su postura respecto a Génova cuando calificó el año pasado a Feijóo y a su comportamiento como “un ignorante, un sectario y un incompetente” tras las tensiones por el decreto de ahorro energético. No solo ha respondido Iceta, sino también la ministra portavoz, Isabel Rodríguez, que ha interpretado esta abstención como la consolidación de su vínculo con la extrema derecha, en concreto, con el partido de Santiago Abascal, Vox.

Desde el partido ultraderechista, el diputado Jorge Buxadé, ha cuestionado la abstención del PP señalando que “los españoles tienen derecho a conocer la posición del PP” y ha criticado que hayan calificado la moción como un “show político”. En concreto, tras las palabras de la secretaria general del PP, Cuca Gamarra, la cual declaraba que se desentenderá de Vox durante esta moción y se centrará en “evidenciar las carencias” del Gobierno “temerario, agotado e inflamado” del PSOE y Unidas Podemos.

Los españoles tienen derecho a conocer la posición del PP 

“La verdadera moción de censura será el 28 de mayo cuando hablen millones de españoles en las urnas”, aseguraba Génova al considerar que “hay motivos para censurar y cambiar” al Ejecutivo de coalición. Desde el PP, señalan que el camino de Vox a través de la moción de censura no es el camino porque solo daría “oxígeno” a la gestión de Sánchez con “una victoria parlamentaria”.

Reproche e invitación

“No se si Gamarra lo que quiere decir es que se van a salir del Congreso de los Diputados, que no van a estar presentes en el debate o no van a intervenir. No sé a lo que se está refiriendo”, indicaba Buxadé. Finalmente, se ha comprobado que la agenda de Feijóo ha tirado por no acudir al debate de la moción de censura de Vox que ha presentado el catedrático de Economía y exdirigente del Partido Comunista, Ramón Tamames, como candidato.

Nuestro voto es el que no quieren ni Sánchez ni Abascal

También se suman las declaraciones de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, tildando al candidato de Vox como “peliagudo” y “polémico” por algunas de las palabras que ha concedido en algunas entrevistas. Para Génova ya está claro y han señalado que pulsarán el voto de la abstención el miércoles 22 de marzo. “Nuestro voto es el que no quieren ni Sánchez ni Abascal”, declaraban fuentes del equipo de Feijóo a Europa Press.

Una opinión que no ha gustado al líder de Vox este martes que ha cargado contra el Partido Popular señalando que “sobran los motivos” para presentar esta moción y poner fin a esta legislatura “suicida”. Pero Abascal, sabe que necesita el apoyo del PP y ha pedido votar de manera conjunta esta iniciativa. “Votemos juntos hoy y entendámonos mañana para ofrecer a España una alternativa sólida”, a pesar del ataque lanzado contra Génova.