Desde la ya histórica votación de la convalidación de la reforma laboral, Unión del Pueblo Navarro vive una crisis interna mayúscula entre la dirección del partido, encabezado por el presidente, Javier Esparza, y los diputados díscolos, Sergio Sayas y Carlos García Adanero, con acusaciones cruzadas entre ambas partes. Sin embargo, pese a la gravedad de la situación, lo cierto es que no es la primera vez que sucede algo así dentro de las filas de UPN.

Tal y como recordaba recientemente ElPlural.com, hace 15 años, otro diputado de UPN también se saltó la disciplina de voto para remar en contra de su partido y a favor del PP. En concreto, en el año 2008, cuando se votaban los Presupuestos Generales del Estado con José Luis Rodríguez Zapatero al frente del Gobierno, Santiago Cervera hizo caso omiso a las órdenes de su formación y se alió con el PP para votar en contra de las cuentas presentadas por el Ejecutivo socialista. Paradojas de la vida, uno de los dirigentes que más peleó contra Cervera para hacerle entrar en razón fue el mismo Carlos García Adanero que años más tarde emprendería el mismo camino. “El sentido del voto de los cargos de UPN en todas las instituciones, incluido el Congreso, lo deciden los órganos internos del partido […] tanto los diputados, como los senadores y cualquier otro cargo saben que han sido elegidos por ir en las listas de UPN, están obligados por las decisiones que toman los órganos correspondientes”, llegó a decir Adanero.

Cervera encontró cobijo en el PP

No obstante, Adanero no consiguió convencer a Cervera, que finalmente se saltó la disciplina de voto. Fruto de ello, UPN le abrió un expediente disciplinar para ser expulsado. Pero, a diferencia de con Adanero y Sergio Sayas, no hizo falta que este expediente se resolviera, puesto que Cervera abandonó el partido para pasarse al PP.

Un año más tarde de cambiar de filas, el PP de Navarra (surgido precisamente tras la abrupta ruptura de los populares con UPN) eligió a Cervera como su presidente. El peso de este en las filas de los azules fue creciendo de manera exponencial, llegando incluso a ocupar el quinto lugar en la lista del PP por Madrid para las elecciones generales de 2011.

No obstante, el ascenso frenético de Cervera dentro del PP no quedó ahí, sino que después de los mencionados comicios, los populares decidieron seguir promocionado al exdiputado de UPN y le designaron secretario cuarto de la Mesa del Congreso de los Diputados.

Finalmente, la historia de hadas entre Cervera y el PP finalizó de manera repentina, cuando el 9 de diciembre de 2012 fue detenido por la Guardia Civil por el caso de las amenazas al expresidente de Caja Navarra José Antonio Asiaín, a quien exigían 25.000 euros por no revelar información interna de la entidad. El dinero tenía que dejarse en un sobre en una rendija de la muralla de Pamplona y Cervera fue sorprendido por los agentes recogiendo el señuelo.

El exintegrante de UPN explicó entonces que había recibido un correo electrónico con similares instrucciones en el que se le alertaba de que encontraría en ese punto una documentación relevante sobre Caja Navarra. Renunció a su acta de diputado tras su detención y defendió que había sido víctima de una trampa. 

En 2015 fue absuelto, al considerar el magistrado que no se había presentado prueba de cargo suficiente para acreditar la existencia del delito de amenazas.