Este viernes Más Madrid, PSOE y Unidas Podemos registraban en la Asamblea de Madrid una petición para reanudar la comisión de investigación sobre las muertes por coronavirus en las residencias madrileñas –el asunto se paralizó por la convocatoria de elecciones por parte de Isabel Díaz Ayuso-. En la solicitud, a la que ha tenido acceso ElPlural.com, los tres grupos de la izquierda con representación en la Asamblea señalaban que el objetivo de dicha comisión sería “aclarar qué pasó” y “evitar que vuelva a suceder en el futuro”. En este sentido, abogaban por tomar declaraciones tanto a la propia Ayuso, como a otros altos cargos del gobierno madrileño, para conocer de primera mano lo que sucedió durante los meses de febrero a junio de 2020 en las residencias de mayores, las medidas que se tomaron y, si fuera necesario, derivar responsabilidades. 

Una petición que la izquierda espera que el Partido Popular y Vox apoye. “Nos parecería una barbaridad hacer borrón y cuenta nueva ante este hecho que ha sido traumático. El Gobierno de Ayuso debería haberse reunido como mínimo con los familiares de los fallecidos y queremos reanudar ese trabajo para depurar responsabilidades políticas”, destacaba la portavoz de Más Madrid y líder de la oposición, Mónica García, quien añadía que si populares y extrema derecha vetaban la comisión, significaría que “tendrían algo que ocultar”.

“No puede ser que no se sepa lo que ha pasado con los 7.000 mayores fallecidos en residencias. Exigimos responsabilidad para saber qué pasó con aquellos protocolos que no auxiliaron a estas”, denunciaba por su parte la portavoz del PSOE en la Cámara regional, Hana Jalloul. Por último, la portavoz de Unidas Podemos-IU, Carolina Alonso, ha insistido en que no entenderían que algún grupo no apoyara esta iniciativa cuando -dice- se cerró "de manera abrupta". A su juicio, deben depurarse todas las responsabilidades políticas posibles porque "sin verdad no hay libertad".

Durante la primera ola de la pandemia, el COVID-19 se cebó con las residencias de toda España y, en especial, con las de la Comunidad de Madrid, donde, según el INE, más de 6.000 ancianos perdieron su vida tras haberse contagiado o presentaban síntomas compatibles con la enfermedad. Ahora, más de un año después, las muertes en los centros de mayores han ascendido hasta las más de 29.600 personas.

De esta manera, el asunto se encuentra en manos de la Mesa de la Asamblea, donde el Partido Popular tiene mayoría absoluta -controlan cuatro de los siete puestos-. Los populares, sin embargo, ya han adelantado que no van a apoyar la petición de las fuerzas de izquierdas. “El PP no va a ser ningún tipo de soporte para que jueguen con el dolor de las familias madrileñas e intenten utilizar ese dolor contra Isabel Díaz Ayuso. Es inaceptable”, justificaba su portavoz adjunto en la Asamblea de Madrid, Pedro Muñoz Abrines, pocos minutos después de registrarse el escrito.

Una cadena de acusaciones contra Iglesias

Una negativa del PP a reanudar la comisión de investigación sobre las muertes en las residencias que sorprende ya que llega después de que precisamente los de Casado hayan estado responsabilizando, desde el primer momento de la crisis sanitaria, de estos decesos a Pablo Iglesias.

En este sentido, hay que recordar que el rifirrafe político durante las primeras etapas por la gestión de las residencias de ancianos fue una constante. En aquellos meses, PP y Vox unieron sus fuerzas contra el Gobierno central y Pablo Iglesias, entonces vicepresidente segundo y ministro de Derechos Sociales y Agenda 2030, al que acusaron en varias ocasiones de ser el responsable de las residencias y, por lo tanto, de las muertes por coronavirus. Tanto la formación de Pablo Casado como la de ultraderecha sostenían su discurso en el 'mando único' de la administración central con la declaración del estado de alarma. Sin embargo, el real decreto ley de 14 de marzo que establecía el estado de alarma señalaba en el artículo sexto, llamado "Gestión ordinaria de los servicios", que las comunidades autónomas mantendrían sus competencias, entre las que figuran las residencias de ancianos y de los hospitales.

En aquel momento, la dirección del PP llegó a pedir por escrito a todos sus dirigentes que en sus declaraciones públicas responsabilizaran al vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, del desastre de las residencias madrileñas, a pesar de reconocer que la gestión regional de estos centros dependía (y depende) directamente del Gobierno, presidido por la popular Isabel Díaz Ayuso, entonces gobernando en coalición con Ciudadanos.

Una orden que no tardaron en seguir dentro de las filas del PP. “Él tenía el mando único en las residencias de ancianos y jamás hizo absolutamente nada por ninguna. Y viéndose acorralado, ha decidido que nos metamos todos en la misma melé, pero es que yo sí he estado ahí, y él no ha estado nunca”, denunció la presidenta autonómica, Isabel Díaz Ayuso. "Me parece que quien no ha hecho absolutamente nada, quien no ha dictado un solo protocolo ni una sola instrucción, difícilmente puede tener la legitimidad de decir ahora que se han hecho actuaciones criminales”, señaló por su parte el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida. “Bajo su tutela han muerto 16.000 personas mayores. No se excuse en los datos de las comunidades autónomas, lo que hay es una responsabilidad única que tiene que asumir”, afeó el secretario general de los populares, Teodoro García Egea.