A media tarde de este pasado jueves se consumó un nuevo “pacto de la vergüenza”. Aragón engrosa la lista de territorios en los que el Partido Popular se ha echado en brazos de la ultraderecha para acceder al Gobierno, ya sea municipal o, como en este caso, autonómico. El acuerdo alcanzado entre los conservadores y Vox cristalizaba este viernes con la habitual foto de la firma entre los dos equipos negociadores. Una estampa de la que ha huido el dirigente del PP aragonés y futuro presidente regional, Jorge Azcón. El requiebro de los conservadores supone, a ojos del Partido Socialista, no sólo una “nueva cesión” a la extrema derecha, sino la confirmación de la cobardía de un Alberto Núñez Feijóo al que no le tiembla el pulso para cerrar acuerdos con el “involucionismo” que representa la formación de Santiago Abascal, pero que, a su vez, evita el escarnio público de la fotografía. “Pactos con Vox, sí, pero sin dar la cara”, afean desde el cuartel general del PSOE.

Tras meses de un intenso tira y afloja en Aragón, el Partido Popular y Vox han consumado una nueva alianza ultra conservadora en línea con la del resto de regiones en las que los de Alberto Núñez Feijóo han tenido la oportunidad de negociar para gobernar -excepto, de momento, Murcia y Ceuta-. Pero este pacto parece no enorgullecer al popular Jorge Azcón, que ha decidido evitar la foto con la extrema derecha y no ha acudido a la firma del acuerdo este viernes. La próxima semana el líder aragonés será investido presidente con los votos de Vox.

Apenas poco más que 12 horas después de comunicar que han llegado a un acuerdo para formar gobierno en Aragón se ha producido un acto para firmar el texto. Con luz y taquígrafos, los populares y ultras han convocado a la prensa y sus equipos a las 12:30 am de este viernes para celebrar el esperado pacto, pero Jorge Azcón ha optado por no asistir. No hay foto de los dos protagonistas. Así, la alianza ha sido suscrita por la número dos del PP aragonés, Ana Alós. Por su parte, desde Vox ha acudido su portavoz en las Cortes autonómicas, Alejandro Nolasco. 

Tras este acto, que pone encima de la mesa el convenio que pasa por dar a los de Santiago Abascal dos consejerías -una de Desarrollo Territorial, Despoblación y Justicia con rango de vicepresidencia y otra de Agricultura y Ganadería-, se ha activado el calendario. La Junta de Portavoces para poner fecha a la investidura se va a celebrar el próximo lunes 7 de agosto, por lo que será al menos 48 horas más tarde cuando Azcón pronuncie su discurso como candidato posible. El jueves será el turno del resto de formaciones mientras que el viernes se producirá la votación. 

Feijóo elige camino

Desde el entorno del PSOE retratan la “nueva forma de hacer política” del líder del Partido Popular. La portavoz socialista, Pilar Alegría, ha afeado al jefe de los conservadores la cobardía exhibida ante una “nueva cesión a la ultraderecha”. Lo ha hecho a través de un vídeo difundido por resortes socialistas en las diferentes redes del partido. La también ministra de Educación subraya que este movimiento del PP “marca el camino” que ha escogido Alberto Núñez Feijóo y que este acuerdo es fruto de aquella “reunión secreta” con Santiago Abascal que Génova trató de ocultar, pero que finalmente, tras verse arrinconados, reconoció públicamente. Un encuentro del que, por cierto, tal y como denuncia Alegría, aún no ha trascendido “el más mínimo detalle”.

La portavoz de los socialistas recuerda que mientras el presidente del PP enviaba una misiva al jefe del Ejecutivo para concertar una reunión y abordar la gobernabilidad del país, el propio Feijóo mantenía estos encuentros fuera de foco con su homólogo de Vox. Para Pilar Alegría este acuerdo no es sino la enésima evidencia de que el PP se ha echado en brazos de la ultraderecha. “Van de la mano. Feijóo ha elegido camino”, precisa la ministra, al tiempo que afeaba la técnica del avestruz de Jorge Azcón, quien ha evitado la fotografía de la firma del acuerdo con sus nuevos socios de Gobierno en Aragón. Un pacto mediante el cual los populares entregan a la ultraderecha las llaves de una Vicepresidencia y una Consejería de la Administración autonómica. “¿Pactos con la ultraderecha? Sí, pero sin dar la cara”, ha censurado la dirigente del PSOE.

En paralelo, Alegría ha rematado su intervención haciendo énfasis en las “mentiras” de un Feijóo que carga sin miramientos contra las vacaciones del presidente del Gobierno en Marruecos. Lo hace, según las quejas de los socialistas, sin aportar la más mínima explicación sobre sus “vacaciones en el barco de un narcotraficante”. Tampoco esclarece el asunto de su sobresueldo; asunto por el que el líder del Partido Popular tan solo se ha limitado a justificar que se trata de una remuneración en calidad de “gasto de representación” y que es extensible a toda la Junta Directiva Nacional del partido.

El diagnóstico de Ferraz

En último término, la portavoz socialista ha recordado al Partido Popular que los españoles ya se pronunciaron sobre sus pactos “involucionistas” en las urnas. “Hablaron claro y dijeron que no querían pactos con la ultraderecha de recortes y retrocesos, pero parece que Feijóo no se ha enterado todavía”, ha lamentado Pilar Alegría.

Esta última intervención entronca con el análisis postelectoral de la Ejecutiva Federal del Partido Socialista. Retomando la normalidad tras la intensa celebración del resultado electoral del 23J, los dirigentes de la formación, encabezados por su líder, concluyeron que el enésimo acto de resistencia de Sánchez, entre otras razones, se explica en base a la cooperación del PP con Vox. “Si das más miedo que Abascal dejas el camino del centro abierto. Nosotros lo hemos aprovechado”, comentaba un alto cargo del partido.

En este sentido, en fueros de la organización socialista consideran que la fusión total del conservadurismo español con la ultraderecha ha motivado el rechazo de una parte de la población, especialmente la que vive en territorios domeñados por el tándem PP-Vox. Es la principal diferencia con el mensaje lanzado en los prolegómenos de las municipales y autonómicas. “Hasta que no ves las orejas al lobo, no actúas. Ya no son especulaciones como en el 28M, sino hechos tangibles. Muchos territorios han votado en reacción a lo que ha pasado en sus Gobiernos”, sostienen en fuentes de la Ejecutiva, quienes remarcan que el 23 de julio fue la prueba palpable de que España “no es monolítica”, sino “plural”.