Mariano Rajoy quiere más, no conforme con haber sido investido presidente reclama ahora responsabilidad al resto de partidos para ayudarle a gobernar y sacar adelante los presupuestos. "No se puede dar paso a la investidura y desamparar al Gobierno", ha dicho. 

La sesión para la segunda y definitiva votación convertirle en presidente del Gobierno se ha iniciado con un minuto de silencio contra la violencia machista. El candidato ha subido a la tribuna entre aplausos de la bancada del PP. Tras agradecer al líder de Ciudadanos, Albert Rivera, y a la diputada de Coalición Canaria su apoyo ha insistido reiteradamente en reclamar más apoyos. "España necesita algo más que una simple investidura", ha dicho.

"No pido la luna, pido un Gobierno previsible, que sus líneas sean conocidas desde el principio, para que todo el mundo sepa que va a ocurrir y que no, y que todo el mundo sepa a qué abstenerse", ha subrayado. Mariano Rajoy quiere que le ayuden a aprobar los presupuestos. "No es razonable gobernar sin presupuestos. No se puede proclamar que se va a votar para facilitar un gobierno si no se está dispuesto a darle su principal herramienta", ha insitido. Al mismo tiempo ha ofrecido una "sincera voluntad de entendimiento" pero, eso sí, ha dicho que no se puede pretender que gobierno con otro programa político que no sea el suyo y que, además, "fue el que quisieron mayoritarimente los españoles". 

El portavoz socialista, Antonio Hernando ha subido a la tribuna para advertirle que sólo le iban a convertir presidente por responsabilidad y para acabar con el bloqueo político. "Ni usted ni su proyecto cuentan con nuestra confianza" ni tampoco, por supuesto, para validar sus políticas. Le ha advertido de que el Grupo Socialista va a "vigilar cada paso que dé" y que se proponen "aprobar iniciativas al frente de una mayoría que ni es suya ni de ningún grupo". "Usted está en clara minoría y bajo una estrecha vigilancia", le ha advertido anunciándole que el PSOE hará "su más firme oposición"