Losantos, en su programa de esRadio



Federico Jiménez Losantos sigue cargando contra Mariano Rajoy desde las páginas de El Mundo, pero en esta ocasión también, lo hace contra PRISA, al afirmar que el presidente del Gobierno “ha relegado a FAES a favor” del grupo de Cebrián, mientras éste, añade, “hace primar los negocios sobre la ideología”. El presidente de Libertad Digital, que recibió, según Bárcenas, fondos del PP en otra época para seguir adelante con su proyecto editorial, reprocha ahora a Rajoy que "salvara la deuda de PRISA".

El sofá en el que Polanco "ofreció" a Aznar un pacto
Según Losantos, José María Aznar “solía mostrar en la sala de columnas y canapés de la Moncloa el sofá en el que Polanco le ofreció tratarlo, si se portaba bien con Prisa, como a Felipe González, es decir, como a una reina sin más rey que Don Jesús del Gran Poder, cuya soberanía no toleraba límites pero negociaba protectorados”.

Rajoy salvó la deuda de 3.400 euros de PRISA
El periodista se burla de la frase que suele decir habitualmente el “sucesor digital” de Aznar sobre que a él “nadie le dice lo que tiene que hacer”. Su pacto con PRISA lo desmiente, asegura Losantos, que asegura que el presidente “salvó la deuda de 3.400 millones del Grupo y lo convirtió en la estrella de la copa de Navidad del PP”. Por su parte, Cebrián –añade- elogia a Rajoy “ante Felipe González, Monti, Letta y otros veteroprogres”.

La estrategia de Rajoy, diferente de la de Fraga y Aznar
Losantos recuerda que Fraga “tenía en la Coalición Popular cinco institutos de reflexión política o think tanks” y que Aznar “se tomó en serio la creación de unas bases ideológicas para el PP y los redujo a uno, FAES”. Sin embargo, Rajoy –afirma “ha relegado a FAES en favor de Prisa, el ‘intelectual colectivo’ de la izquierda española desde hace 35 años”.

El columnista de El Mundo reprocha a Rajoy que “prohibiera” a los suyos ir a la presentación de un libro de Aznar o a los premios de El Mundo, mientras él mismo “acude a la fundación Berggruen del gran accionista de Liberty, o sea, Prisa”.