El secretario general del Grupo Parlamentario Vox, José María Figaredo, ha vuelto este miércoles al Congreso de los Diputados para recuperar su habitual pugna con la vicepresidenta del Gobierno y ministra de Hacienda, María Jesús Montero. El enfrentamiento, que siempre protagoniza un de los momentos destacables de la sesión de control al Ejecutivo, no ha decepcionado y ha vuelto centrarse en una materia que gusta a ambos: los impuestos.

De un lado, el diputado ultraderechista ha comenzado su intervención de forma contundente, haciendo referencia a la mujer del presidente del Gobierno y echando en cara a la titular de Hacienda el mal funcionamiento de servicios públicos cuya competencia está delegada en las comunidades autónomas. “¿Qué hacen con los impuestos?”, ha preguntado Figaredo. La vicepresidenta se reía en los segundos previos a su intervención y trasladaba al miembro de Vox la evidencia conocida por todos.

¿Sabe usted de quién dependen las listas de espera en la sanidad pública?”, ha introducido Montero de forma irónica, “de los gobiernos autonómicos, donde ustedes gobernaban y que ahora apoyan; donde están pactando para aprobar presupuestos”, ha continuado. Al hilo, la dirigente de Hacienda ha recomendado a la formación de extrema derecha “apuntarse el tanto” y forzar a los gobiernos autonómico del PP a “incorporar más recursos a la sanidad”.

Este incremento en gastos públicos, desde sanitarios hasta educativos, es posible “puesto que las comunidades autónomas tienen más recursos que nunca”, ha desgranado Montero, señalando el incremento de 300.000 millones de euros destinado a las autonomías en comparación con los tiempos del mandato de Mariano Rajoy. Las partidas de gasto han sido desgranadas por la vicepresidenta, que ha ahondado en su respuesta.

En qué se gastan ustedes el préstamo de 9 millones que le ha dado un banco húngaro

Un 60% de impuestos se destinan a gasto social, que ha subido un 12,6% con respecto a 2022. Pensiones, dependencia, educación con récord de becas, sanidad, en todas las políticas que permiten la igualdad de oportunidades. Eso que ustedes no creen, les parece una aberración social y que, según ustedes, estaría todo mucho mejor con el dinero en el bolsillo de los españoles, pero de los que tienen dinero”, ha zanjado su primera intervención.

Dinero de Hungría

Sin embargo, Figaredo no ha cejado en su intento de cargar contra los impuestos y la redistribución de riqueza. “Su gestión es un absoluto desastre y el país cada vez está peor. Y ustedes cobran cada vez más impuestos. No aflojan”, ha trasladado el ultraderechista desde su escaño. Sentada desde el suyo, por una lesión en el pie, Montero ha recitado una serie de datos sobre “lo peor” que va el país. “Récord en creación de empleo, la economía que más crece del conjunto del mundo, la inflación en 1,5%”, ha relatado.

A continuación, ha recogido la figura utilizada habitualmente por la hoy ausente ministra de Trabajo, Yolanda Díaz: “le voy a dar un dato muy claro”. “Los impuestos financian las comunidades autónomas, o de dónde creen usted que sale el dinero de las transferencias para la sanidad, la educación o la dependencia. De los impuestos, del dinero que permite la redistribución de la riqueza, en lo que ustedes no creen”. Para zanjar su intercambio con Figaredo, Montero ha dado un giro total y ha puesto el foco en el dinero de Vox.

“¿En qué se lo gastan ustedes? Su secretario general en Cataluña se gastó el dinero del grupo parlamentario en peluquería, tintorería, comida a domicilio o en el colegio de sus hijos. Dos sanciones por más de 200.000 euros que les ha puesto el Tribunal de Cuentas por financiación irregular. ¿En qué se gastan ustedes el préstamo que le ha dado un banco húngaro por un importe de 9,2 millones de euros?”, ha sentenciado.