Tras la polémica votación de Podemos para elegir a las 26 personas que prepararán la asamblea constituyente de otoño, el equipo propuesto y encabezado por Pablo Iglesias ha obtenido el 86,8% de los votos, entre el jueves y el viernes, garantizándose así mantener el liderazgo de la formación.

La votación se celebró por Internet
En concreto, la lista de Iglesias ha recibido un total de 48.454 votos de los 55.882 simpatizantes que han participado en la votación, celebrada por Internet, frente a los 5.774 votos (un 10,24%) que ha recabado la lista alternativa avalada por el Círculo de Enfermeras de Podemos, encabezada por la antropóloga Carolina Huelmo.

Iglesias sigue encabezando la plataforma
El equipo de Iglesias está formado por 26 personas y entre ellas figuran, además de Pablo Iglesias como responsable político del equipo, el también profesor universitario Luis Alegre, que en varias ocasiones ha ejercido de portavoz, como coordinador del equipo, o los eurodiputados electos de la formación Lola Sánchez y Pablo Echenique.

La lista alternativa
Por su parte, la lista alternativa avalada por el Círculo de Enfermeras, cuya candidatura hizo pública a escasas horas de la votación, estaba formada por 24 personas, todas ellas desconocidas a nivel mediático hasta ahora.

La única lista hasta un día antes de la votación
De hecho, la lista de Pablo Iglesias fue la primera y la única en aspirar a preparar el encuentro de otoño hasta un día antes de la votación y su anuncio suscitó una discusión abierta entre los círculos de la formación, que consideraban el procedimiento de votación poco apropiado, tanto por sus formas como por sus tiempos.

La primera crisis
La plataforma que dirige Pablo Iglesias sufrió su primera crisis interna tras la decisión de su cúpula de convocar una votación de listas cerradas para elegir al equipo que organizará el congreso fundacional, el próximo otoño, donde se decidirá la estructura del partido y como se articulará la participación asamblearia.

En abril pasado, cuando Podemos aún no contaba con el millón y medio de votos que le dieron las elecciones europeas, una asamblea con representantes de toda España decidió celebrar un cónclave el 14 de junio para plantear el futuro. Los impulsores de la plataforma cambiaron de idea y plantearon organizar unas primarias, pero con listas cerradas, en las que pueden votar los ciudadanos a través de Internet a 25 personas que dirigirán el proceso hasta la asamblea constituyente, que se celebrará en octubre próximo.

Reproches de “falta de democracia”
Según adelantó El País, una asamblea celebrada en Madrid subió de tono y hubo desde acusaciones de “falta de democracia” por parte de las bases hasta enfado de una de las caras más visibles de este movimiento, el profesor Juan Carlos Monedero. El argumento de los críticos es que la dirección recurre al modelo de los partidos tradicionales, de listas cerradas, y, además, protestaron por el escaso plazo que se les dio (seis días) para configurar una candidatura alternativa a la de Pablo Iglesias.

Monedero llegó a decir, al hacer visible su malestar por la situación, que tal vez en Podemos estén conviviendo modelos políticos incompatibles, y advirtió del riesgo de ruptura entre quienes buscan un “partido viejo basado en el sistema de delegados”, al referirse a los representantes de las asambleas que piden tener un mayor protagonismo, frente a los promotores del proyecto, que, según él, quieren una organización “más abierta”, en la que se pueda participar a través de Internet. Monedero advirtió de que la plataforma corre el riesgo de tener un final como el 15M, “democrático”, pero “inoperativo”.

Un “golpe de estado” desde Izquierda Anticapitalista
Ante los reproches de “falta de democracia” que continuaban haciéndole las bases, Monedero justificó entonces las listas cerradas por la amenaza de un “golpe de estado” en la organización por parte de dirigentes de Izquierda Anticapitalista, que, según afirmó, dieron instrucciones a las bases sobre cómo actuar en la asamblea para hacerse con la organización de la asamblea del pasado fin de semana.