Isabel Rodríguez ha empezado su andadura como portavoz del Gobierno pidiendo disculpas y dando las gracias. Perdón por el retraso, pero la reunión ha sido más larga e interesante de lo esperado. Gracias a todos por estar aquí. Perdón de nuevo, me avisan de que ya está bien y que es hora de cortar el grifo a los periodistas. Y gracias por entenderlo. Y entre muestras de gratitud nerviosa que empiezan a ser marca de la casa, la también ministra de Política Territorial ha despejado su segundo martes en La Moncloa con “mucho contenido”, muchos millones ya invertidos y paso firme en materia legislativa: “En este Consejo de Ministros ha habido dos grades asuntos: un anteproyecto de ley para los derechos de los consumidores y la ley de memoria democrática, por lo que me acompañan el ministro de Consumo, Alberto Garzón, y el ministro de Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Histórica, Félix Bolaños”.

Anuncios importantes que, sin embargo, se han dejado para el final. Antes de ello, Rodríguez ha decidido celebrar que la mitad de la población española ya esté inmunizada frente al virus, recordar que el 90% de las personas que estuvieron en ERTE ya han salido de esa difícil situación y anunciar varias novedades este martes debatidas y aprobadas en el seno del Consejo de Ministros: la posibilidad de comprar test de autodiagnóstico sin receta en las farmacias españoles (“si el test diera positivo, deberíamos recurrir al servicio de salud”) y la aprobación de las nuevas reglas de la Política Agraria Común (PAC) a la que hace tres semanas dio luz verde la Unión Europea y cuyo montante para España será de 48.000 millones de euros.

Sería después cuando la portavoz cedería el turno a los dos protagonistas de la rueda de prensa. Protagonistas por cosas distintas, ya que Bolaños ha obtenido el beneplácito de la prensa con la nueva Ley de Memoria Democrática (que él mismo aplazó la semana pasada pese al trabajo previo de Carmen Calvo) mientras que Garzón ha sido más cuestionado por el precio de la electricidad (en máximos históricos) y la petición de reducir el consumo de carne (“¿se sintió desprestigiado por el presidente del Gobierno?”) que por el anteproyecto para reducir las estafas que hoy presentaba.

Poner a las víctimas en el centro

Dos objetivos principales (la recuperación de los cuerpos y el reconocimiento de todas las víctimas de la Guerra Civil y la posterior dictadura), tres ejes (poner a las víctimas en el centro de la actuación política, poner en valor el papel desempeñado por las mujeres en la etapa más ominosa de la historia contemporánea española y dar importancia al movimiento memorialista) y cuatro pilares fundamentales (verdad, justicia, reparación y deber de memoria para que aquellos hechos no vuelvan a tener cabida en la sociedad española).

Así es como Félix Bolaños, quien se estrenaba hoy en una rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, ha presentado la nueva Ley de Memoria Democrática. Argumentos que vienen acompañados de un sinfín de medidas concretas como exhumar los restos mortales de José Antonio Primo de Rivera, resignificar el Valle de los Caídos, estudiar qué hacer con la cruz que corona Cuelgamuros, hacer al Gobierno responsable de encontrar los cuerpos desaparecidos, crear un banco de ADN que facilite las labores de búsqueda, hacer una auditoría de los bienes expoliados por el régimen franquista, crear una Fiscalía de Sala para la defensa de los derechos humanos, retirar símbolos y títulos nobiliarios entregados por Francisco Franco, abrir a los investigadores toda la documentación desde el Golpe de Estado hasta la Transición y cambiar la ley para ilegalizar fundaciones que exalten el franquismo, incurran en delitos de odio y atenten contra la memoria de las víctimas.

En cualquier caso, Bolaños ha explicado que la extinción de la Fundación Francisco Franco no será inminente, ya que una vez que se modifique la ley se iniciará un procedimiento administrativo que concluirá con una resolución y posteriormente habrá un procedimiento judicial. "No será una extinción inmediata de la Fundación Francisco Franco si es que así se insta por los órganos competentes".

Además, el ministro ha indicado que la memoria será curricular en la educación y que se abren dos nuevos supuestos para obtener la nacionalidad española: el de los hijos de las españolas que se casaron con extranjeros durante la dictadura y que perdieron la nacionalidad española y el de los hijos mayores que se les dio la opción de conseguir la nacionalidad en la ley de memoria histórica del año 2007 y que solo afectó a los hijos menores.

Garzón y su ley para evitar la estafa

El ministro de Consumo, muy criticado en las últimas fechas por el encarecimiento de la energía y su petición a la población española para reducir el consumo de carne, ha presentado este martes un anteproyecto para poner en marcha las medidas necesarias para garantizar la protección de las personas consumidoras. “Nosotros estamos muy satisfechos de poder poner encima de la mesa una herramienta tan importante como esta, que sancionará situaciones de fraudes o abusos, también en internet”, ha indicado Garzón.

“Estamos hablando de una herramienta que nos asemeja a la Unión Europea, cumple con el mandato de la agenda del consumidor y que ayudará a que las grandes empresas no tengan incentivos para cometer fraudes y abusos”, ha proseguido, añadiendo que esta normativa se adapta a las transformaciones digitales. “Las compras online están en aumento y era necesario incorporar algunas modificaciones que luchen contra elementos como la publicidad engañosa o las prácticas desleales de reseñas no comprobadas”, ha añadido.