Las Cortes de Castilla y León volvieron a copar los titulares tras el enésimo “espectáculo” del vicepresidente del Gobierno regional, Juan García-Gallardo, quien tachó de “imbécil” al procurador de Ciudadanos, Francisco Igea, en sede parlamentaria. La presidenta liberal, Inés Arrimadas, ha responsabilizado al Partido Popular de alentar este “circo diario”.

En los instantes previos a la sesión de control, Inés Arrimadas ha desfilado por los pasillos del Congreso de los Diputados para atender a los medios de comunicación. La dirigente liberal, interrogada por el incidente en las Cortes de Castilla y León, ha calificado como “circo diario” la acción de Vox en la región tras los insultos proferidos por el vicepresidente de la Junta y dirigente ultraderechista, Juan García-Gallardo, al que fuera su predecesor, Francisco Igea.

Gallardo llamó “imbécil” el martes a Igea, durante una intervención en defensa de una interpelación sobre transparencia. El procurador de Ciudadanos replicó los insultos del vicepresidente regional, calificando lo ocurrido como una “vergüenza” para el Parlamento y obteniendo el respaldo de varias caras visibles de su partido, como Edmundo Bal y Begoña Villacís, entre otros.

La líder de los liberales, Inés Arrimadas, ha lamentado que Castilla y León tenga que soportar un “espectáculo diferente” cada día, acentuando que la actitud del vicepresidente es una “falta de respeto” hacia los ciudadanos. Asimismo, ha remarcado que la salida de Ciudadanos del Ejecutivo ha supuesto una gran “pérdida” para los castellanos y leoneses.

Pero Arrimadas no exime de responsabilidades al Partido Popular, asegurando que les da “exactamente igual” el Gobierno autonómico. En este punto, ha recordado que el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, gobernaba junto a Ciudadanos hasta que decidió disolver las Cortes para situar a la ultraderecha como su nuevo socio preferente. Asimismo, ha valorado la “gestión y responsabilidad” de Igea y el resto de exconsejeros liberales en comparación con el “circo diario” de Vox.

El silencio del presidente de las Cortes

Por su parte, Igea ha recordado este miércoles al presidente de las Cortes de Castilla y León, Carlos Pollán, de Vox, que prometió “decoro”. Para el exvicepresidente, esa virtud no solo se basa en llevar corbata, sino que también pasa por “llamar al orden” cuando se escucha un descalificativo en la Cámara.

El procurador liberal ha advertido de que aprovechará la próxima reunión de la Junta de Portavoces para reclamar al presidente de las Cortes que mantenga el orden en el pleno, aunque ha vaticinado un fracaso en dicha petición. “En Vox se vive con cierta tensión, no diré miedo, pero sí cierta tensión”, ha valorado un Igea que ha tachado de “sorprendente” el silencio del jefe del Legislativo.

“No les gustan las Cortes, no les gusta el debate, no les gusta que haya minorías…”, ha lamentado Igea, que también ha rechazado la imagen “barriobajera” que se trasladó a los ciudadanos por parte de un Gobierno que vive de la “provocación permanente” y que ha adquirido el insulto como “arma política”.