El exministro del Interior Jorge Fernández Díaz será elegido este miércoles, salvo sorpresas, presidente de la Comisión de Asuntos Exteriores del Congreso, s pesar del rechazo generalizado en las filas de la oposición, que mayoritariamente votará en blanco, salvo Podemos, que presentará un candidato alternativo.

Una alternativa sin consenso
El candidado de Podemos no será respaldado ni por el PSOE ni por Ciudadanos, que se han decantado por una papeleta en blanco para mostrar su disconformidad con la elección del PP, al mismo tiempo que respetan el acuerdo global que firmaron todos los grupos para repartirse las presidencias y vicepresidencias de las comisiones parlamentarias.

La comisión viene precedida por la reprobación del exministro por todas las fuerzas políticas, salvo el PP, a causa de sus conversaciones con el director de la Oficina Antifraude de Cataluña para buscar pruebas contra dirigentes independentistas. Además, el Congreso, con el PP en contra, aprobó la creación de una comisión para investigar el supuesto uso partidista que el exministro hizo de los medios de Interior.

Un ministro conspirador
Fernández Díaz, maniobró en el año 2014, poco antes de la consulta soberanista del 9N, para incriminar a altos dirigentes de los principales partidos independentistas en casos de corrupción.Así se desprendió de grabaciones en las que se escucha a Fernández Díaz conversando con el jefe de la oficina antifraude catalana, Daniel de Alfonso discutiendo cómo conseguir datos para desprestigiar o incluso acusar a familiares y dirigentes de Esquerra Republicana de Cataluña (ERC) y de Convergencia (CDC) como como Felip Puig u Oriol Junqueras.

Tanto el PSOE como Ciudadanos han dejado claro que la elección del exministro para presidir la comisión ni les gusta ni les parece adecuada, pero votarán en blanco y no por el candidato alternativo de Podemos, Pablo Bustinduy, porque, entre otras cosas, mantienen su compromiso con el acuerdo firmado con todos los grupos para repartirse los cargos de las comisiones.