Normalmente, cuando hablamos de los resultados del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), lo hacemos para referirnos a las cuestiones que hacen mención directa a la intención de voto de los encuestados. Sin embargo, en cada barómetro se realizan muchas más preguntas (cerca de medio centenar, dependiendo de cada mes). 

Entre todas las cuestiones, hay una que preocupa especialmente a Ciudadanos, y es la interrogante que pregunta por dónde situarían a cada partido en el espectro político, siendo 0 la extrema izquierda y 10 la extrema derecha. Si atendemos a las palabras de los pesos pesados de la formación naranja, Cs es un partido de centro o como mucho de centro derecha, es decir, que los dirigentes del partido lo sitúan entre el 5 y el 6, aproximadamente. Pero, ¿y el resto de la población? Con los datos en la mano del último CIS de noviembre, los encuestados sitúan a la formación naranja en un 7'2, solamente superado en la derecha por el Partido Popular (8'3) -hay que apuntar que esta cuestión solamente recoge las valoraciones sobre PP, Cs, PSOE (4'1), Podemos (2'3) e IU (2'2)-. 

Gráfico del CIS sobre dónde coloca cada encuestado a cada formación polítca

Gráfico del CIS sobre dónde coloca cada encuestado a cada formación política

Sin embargo, más que la percepción actual que existe sobre Ciudadanos, preocupa en el partido la que puede existir en el futuro más próximo, o lo que es lo mismo, en el CIS de diciembre. ¿Y por qué? Porque en este barómetro ya se tendrá en cuenta el reciente pacto al que han llegado con Vox en Andalucía. Y va a ser muy difícil que los encuestados vuelvan a comprar el discurso de que los de Rivera son de centro, cuando llegan a acuerdos con la extrema derecha. 

Un gráfico, mejor que mil palabras 

Sin embargo, este viraje sin retorno de Ciudadanos a la derecha no es algo novedoso. De hecho, tal y como publicamos hace dos meses en este medio, un gráfico explica claramente este cambio de percepción entre los españoles. En él, plasmábamos lo que opinaba la gente sobre la formación naranja en el mes de octubre de los años 2014, 2015, 2016, 2017 y 2018. Y el resultado no dejaba lugar a dudas, en cinco años, el partido había pasado de un 5'38 a un 7'25, con un aumento progresivo cada año (especialmente agresivo en el último y el primero).   

De cara a 2019, si los de Rivera van a seguir apostando por el discurso de que son un partido de centro, tienen la dura tarea de intentar frenar este repunte, aunque para ello pactar con partidos ultraderechistas como Vox no parece a priori la mejor táctica a seguir.