Fuentes consultadas por ElPlural.com señalan que Isabel Díaz Ayuso ha ofrecido a la líder de Vox en la Comunidad de Madrid, Rocío Monasterio, la presidencia de la Asamblea regional.

De esta manera, se evidencia que el PP ya tiene clara cuál será su estrategia para repartirse el poder con la ultraderecha y esta pasa por convencerles para que no entren en el Gobierno y se conformen con la presidencia de la Asamblea de Madrid, cargo que sería para la propia Monasterio.

Aunque no se han celebrado todavía elecciones y el PP ha deslizado que maneja encuestas que darían la mayoría absoluta a Diaz Ayuso el próximo 4 de mayo, la formación conservadora trabaja el escenario de no cumplir esas expectativas y tener la obligación de contar con el apoyo de Vox. Asimismo, a Ciudadanos lo dan por muerto.

La estrategia de los populares pasa por que Ayuso consiga vender públicamente la imagen de que gobierna con mayoría absoluta aunque no la tenga, ocupar así todo el espacio mediático y seguir situándose como la principal opositora de Pedro Sánchez.

Por otro lado, el Partido Popular necesita poder decir ante el resto de España que no pacta con la ultraderecha porque es un partido de centro. De ahí que necesite seguir la misma estrategia que en Andalucia y Murcia: necesitan los votos de Vox, pero no los quieren en el Gobierno.