El presidente de Vox, Santiago Abascal, ha rechazado la posibilidad de expulsar o castigar al líder del partido en Andalucía, Francisco Serrano, por sus declaraciones sobre la sentencia de los cinco miembros de La Manada.

Según ha dicho el líder de Vox, el partido no va "a hacer nada".

Abascal considera que esas palabras se referían a que la sentencia del Tribunal Supremo (TS) estaba "dictada por la turba feminista supremacista" o a que "si una mujer dice sí pero en cualquier momento posterior dice no, inclusive varios días después, el denunciado será condenado a prisión por violación". "Hasta un gatillazo o no haber estado a la altura de lo esperado por la mujer, podría terminar con el impotente en prisión", añadió.

Así, en una entrevista concedida al diario ABC, Abascal ha expresado que "más allá de dimes y diretes y de lo que se ha comentado en las redes sociales, Vox acata y respeta las sentencias judiciales".

"Quiero precisar que Vox tiene una posición de absoluta dureza sobre los delitos de violación, dado que defendemos la cadena perpetua para los violadores", ha zanjado.

Sobre la experiencia de Vox en Andalucía, su líder nacional ha señalado que pese a las "críticas" sobre la ejecución del acuerdo para facilitar la investidura hace un "análisis satisfactorio" porque en Andalucía "se ha producido un cambio después de 40 años, tal y como anhelaba una gran parte de los andaluces".

Por ello, ha valorado que el partido ha sido "premiado por ello", dado que "Vox tuvo 396.000 votos en las autonómicas y en las generales pasó a 615.000 votos en esa comunidad a pesar de los obstáculos y zancadillas del PP y Ciudadanos".