El casco antiguo de Toledo se convierte estos días en un gran escaparate castrense donde las proclamas decimonónicas insertadas en desproporcionadas banderas inundan las fachadas de los principales monumentos de la ciudad, para el “deleite” de los miles de visitantes que acuden este largo “puente” a la Ciudad de las Tres Culturas a disfrutar de su gastronomía y vasto patrimonio cultural. No en vano, Toledo viene celebrando durante este año 2017 su trigésimo aniversario como Ciudad Patrimonio de la Humanidad.

La Inmaculada Concepción

Y es que para el Ejército español, sobre todo para el arma de artillería, su patrona, la Inmaculada Concepción, es algo más que una creencia religiosa o una festividad en toda España. Para los artilleros, que tienen en la Academia de Artillería de Toledo su principal exponente formativo, cultural y religioso, recuerda aquel lejano 8 de diciembre de 1585 cuando tuvo lugar el llamado Milagro de Empel, donde los Tercios españoles, asediados por los ejércitos flamencos, y “gracias” a la aparición de una imagen de la Inmaculada, lograron una gran victoria en la isla de Bommel, situada entre los ríos Mosa y Waal. El general derrotado llegó a decir: “Tal parece que Dios es español al obrar, para mí, tan grande milagro”.

Voto concepcionista del Ayuntamiento

Hasta aquí la leyenda. Pero una cosa es la exaltación militar y otra distinta la abdicación civil, como renovar todos los años el voto concepcionista y la aceptación del dogma de la Inmaculada Concepción de la Virgen María por parte el Ayuntamiento de Toledo. Tanto es así, que la asociación Alternativa Laica demandó en 2008 al Ayuntamiento toledano por el juramento de defender el dogma de la Inmaculada realizado en 2008 por el alcalde socialista, Emiliano García-Page. Si bien es cierto, que desde 2015, la actual alcaldesa no ha participado en este acto religioso, impropio de una administración laica o aconfesional. Otra cosa es que determinados políticos, casi todos del PP, renueven sus votos y obediencia a título personal.

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El “orgullo” del PP

El PP no duda ningún año en mostrar su adhesión a la Inmaculada y a los artilleros. En este sentido, la presidenta del Grupo Parlamentario Popular de las Cortes de Castilla-La Mancha, Ana Guarinos, resaltaba este viernes el papel que cumple la Infantería “como garante de los derechos y libertades de todos los ciudadanos y por velar por la seguridad de los españoles”. Una proclama muy parecida (sino igual) a la expresada por Cospedal en Cataluña. Atendiendo a este argumentario, Guarinos ha mostrado el respaldo “claro y unánime” del Partido Popular a la Infantería española, al tiempo que ha señalado la importancia “de elogiar el trabajo y el esfuerzo que hace esta institución militar en un día como el de hoy (por el viernes), festividad de la Inmaculada Concepción, patrona del Arma de Infantería”.

Y aún es más. Para la presidente del Grupo Popular, “es muy importante que en los tiempos que corren, en los que por desgracia hay quienes quieren poner cortapisas a la Democracia, a la Ley y a los Derechos y Libertades que nos dimos todos los españoles en 1978 y que son ejemplo de convivencia y concordia, ensalcemos a todas aquellas instituciones que velan por la custodia de esas libertades”.

Proclamas decimonónicas y arcaicas

“Amos del mundo a pie y sin dinero”, proclama insertada en una enorme bandera colocada en la fachada principal del Alcázar de Toledo, sede de la Bblioteca de Castilla-La Mancha e importante centro cultural donde se desarrollan numerosas actividades que nada tienen que ver con el dogma de la Inmaculada ni con el Ejército español, a pesar de que durante decenas de años este emblemático edificio estuvo ocupado por militares y aún hoy reivindicado por los nostálgicos del franquismo que todos los años por el mes de septiembre cebran una misa en la llamada cripta de la ignominia donde están depositados los restos mortales de los generales golpistas Moscardó y Milans del Bosch.

De la misma forma, los muros de la Academia de Infantería exhiben otra bandera de tamaño desproporcionado que recuerda a los visitantes que la “Inmaculada es patrona de España y de su Infantería”.

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El ardor eclesiástico

Pero de todas estas enormes banderolas, destaca, y de qué forma, la mostrada en la principal torre de la Catedral Primada de España, donde los militares, con el ardor eclesiástico inquebrantable mostrado por la curia local, han colocado una gran badera de España de unos cuarenta metros de longitud aproximadamente. Pero no es el único edificio propiedad de la Iglesia toledana que muestra a los visitantes la pasión abanderada del arzobispo, que también ha prestado el balcón principal de la sede arzobispal para colocar otra enseña. Ambos monumentos se encuentran enclavados en la Plaza del Ayuntamiento, principal plaza del casco antiguo y el lugar más visitado de toda la ciudad, para que nadie olvide a la Inmaculada Concepción.