PSOE, Ciudadanos y Ahora le han dicho “NO” al alcalde del PP de Guadalajara, Antonio Román, que pretende hacer caja con varios pluriempleos aludiendo su “amor” por la medicina. Los tres antagonistas partidos de la oposición se han opuesto a que el regidor alcarreño pueda cobrar del Ayuntamiento un 80 por ciento del sueldo máximo previsto (unos 60.000 euros) y dedicarse a la medicina el resto del tiempo, o lo que es lo mismo: se niegan a que un alcalde de una ciudad de 85.000 habitantes esté en “misa y repicando”, declara un concejal de la oposición a ELPLURAL.COM, que reconoce la “pasión de Román por los euros contantes y sonantes, ya que hasta diciembre de 2015 era uno de los políticos mejor pagados de España”, añade, “de ahí que fuera también un protegido de Cospedal”.

Aquellos maravillosos 170.000 euros anuales

Y es que la última declaración de bienes de Antonio Román, presentada en el Congreso de los Diputados, ya que como alcalde rehúye y “regatea los que puede”, dicen las fuentes, para dar a conocer sus ingresos y patrimonio, arrojaba un saldo aproximado de 170.000 euros anuales (5.684 euros al mes del Congreso, más 66.076 del Ayuntamiento de Guadalajara y por antigüedad en el SESCAM anuales, 28.700 euros por médico especialista en la misma ciudad, 2.100 euros como consejero general de Ibercaja y pequeños ingresos por el alquiler de una casa y otros devengos, según recogían distintos medios de comunicación en mayo de 2015), a lo que habría que añadir cuentas corrientes que superaban los 110.000 euros, amén de los planes de pensiones. No es de extrañar que el alcalde no quiera renunciar a más sueldos, después de perder  la confianza de Cospedal y la consiguiente e importante retribución de diputado nacional por Guadalajara.

Pide con la boca pequeña una moción de censura

Perder esas cuantiosas remuneraciones y, además, que la oposición no le deje seguir trabajando de médico internista en la sanidad pública y en otras supuestas clínicas privadas si quiere recibir sus honorarios municipales, ha llevado al alcalde del PP a instar a la oposición (gracias a Ciudadanos conservó a la alcaldía) a no rechazar “la oportunidad que tienen para que sus posiciones se cumplan y pongan una moción de censura”, ha dicho en la sesión plenaria celebrada en el ayuntamiento de Guadalajara. Se ponga como se ponga, Román seguirá sin cobrar su nómina de alcalde mientras que mantenga su intransigencia en recibir otras retribuciones como médico. “No voy a abandonar la atención a la ciudad, pero tampoco la medicina, ya que pretenden con esta moción  que deje la medicina o que me dedique a ella como el que juega el  tenis; me parece una frivolidad”, asegura, obviando que nadie le obliga a ser alcalde y que podría dejar el Ayuntamiento y dedicarse a su “pasión” por curar a los demás. “¿Por qué no lo hace?”, se preguntan nuestras fuentes: “fácil, porque supone renunciar a un suculento sueldo; y por ahí no pasamos, o una cosa o la otra”.

No quiere ser alcalde al cien por cien

El alcalde se ha quedado solo porque la cordura y la lógica está con la oposición, que no se niega a que cobre su sueldo de regidor, sino a compatibilizar varias nóminas, como pasa en la totalidad de los ayuntamientos capitalinos de España, donde ningún alcalde, ninguno, tiene dos o más trabajos, ni cobra dos o más sueldos. En este sentido, el  portavoz de Ciudadanos, Alejandro Ruiz,  pide a Román altura de miras y que entienda que ser alcalde de una ciudad de 85.000 habitantes requiere una dedicación exclusiva. Un tanto de lo mismo piensa Daniel Jiménez, portavoz del PSOE,  quien reprocha al PP su empecinada decisión de traer por  tercera vez al pleno esta propuesta, que para Ahora Guadalajara, que defiende la ocupación completa del alcalde, se trata de “un traje a medida de Román, con un sueldazo de premio”. Por su parte, el portavoz del PP, Alfonso Esteban, actuando a la desesperada, pide que se instale algún control tecnológico para ver  cuánto tiempo dedica cada concejal con sueldo al Ayuntamiento, “porque el alcalde está muchas veces a las 7 de la mañana y también a las 11 de la noche, a pesar de su trabajo como médico”. Sin mayoría absoluta no cuela.