WILLIAM RABAN
William Raban es considerado como uno de los directores británicos experimentales más importantes y reconocidos de la segunda mitad del siglo XX, con un trabajo alrededor de los paisajes, el tiempo, el espacio y la política, a través de un trabajo formal siempre inquieto, buscando diferentes formas expresivas, ahondando en el dispositivo fílmico como vehículo para capturar la realidad y modificarla para encontrar una esencia diferente bajo ella.
El S(8) ha proyectado cinco trabajos del cineasta, que van de 1972 a 2016, y que suponen una magnífica aproximación a las coordenadas cinematográficas de Raban desde las diferentes formas de trabajo del cineasta con el medio. Así, las dos más antiguas, Broadwalk y Angles of Incidence, de 1972 y 1973 respectivamente, representan la primera época de trabajo de Raban durante la década de los setenta y que, en los ochenta, cambiará de rumbo. En la primera, el director rodó durante 24 horas de forma ininterrumpida en Regent’s Park, en Londres, filmando el time-lapse para evidenciar la estructura del fotograma a fotograma original. En la segunda pieza, a través de una ventana observamos una imagen que va variando o modificándose a través de cambios en el punto de vista de la cámara. Así, Raban trabaja en el paisaje, en sus variaciones, buscando lo oculto en lo evidente, pero también explorando en la dinámica del espacio y el tiempo. Ideas alrededor de las cuales el director trabajó hasta que a comienzos de los ochenta tomó una escala diferente aunque manteniendo algunas constantes ya presentes en sus inicios.
En About Now MMX, de 2010, por ejemplo, la tercera pieza del programa, Raban rueda desde lo más alto de la Torre Balfron, desde donde la cámara rueda en time-lapse, en su eje, lo que sucede en la ciudad Londres: lo que surge es el movimiento de una parte de la ciudad mostrada como el centro neurológico de ella, jugando con el movimiento humano, ínfimo en comparación con el paisaje urbanístico. Se crea una narración en la que aparentemente no sucede nada aunque la sensación es la contraria, que acontece todo. El tiempo transcurre, como en Time and the Wave, de 2013, que bajo la apariencia de la imagen documental, como excusa más bien, Raban muestra el presente en su inminente desaparición para convertirse, por tanto, en pasado. El tiempo como movimiento pero, en ambos casos, con una mirada política hacia la realidad y, sobre todo, por la forma en que se expone y se reproduce en pantalla. Dos trabajos en apariencia distintos pero complementarios que se alzan como perfectos exponentes del trabajo de Raban durante estos últimos años.