Jane Etta Pitt, madre del actor Brad Pitt, ha fallecido a los 84 años en su ciudad natal de Springfield, Missouri (EE. UU.), según ha trascendido en las últimas horas. La noticia se ha conocido a raíz de un mensaje compartido en redes sociales por su nieta Sydney Pitt, quien le dedicó unas sentidas palabras.
Aunque no se han dado detalles oficiales sobre la causa o la fecha exacta del fallecimiento, el contenido del mensaje de despedida apunta a una pérdida reciente para la familia. En su publicación, Sydney escribe:
“Mi querida abuela, Jane Etta, no estábamos preparados para que te fueras, pero saber que por fin eres libre para cantar, bailar y pintar de nuevo nos lo hace un poco más fácil.”
Jane Etta Pitt fue durante décadas orientadora escolar, y desempeñó un papel activo tanto en su comunidad local como en el desarrollo personal de sus hijos. Estuvo casada con William Alvin Pitt, un empresario del sector del transporte. Juntos criaron a tres hijos: Brad, Doug y Julie, a quienes educaron en un ambiente familiar tradicional, marcado por valores cristianos y un fuerte sentido de la responsabilidad social.
A pesar de la fama mundial de su hijo Brad Pitt, Jane Etta se mantuvo alejada del foco mediático, salvo en contadas apariciones públicas. Una de las más recordadas fue su asistencia a la gala de los Premios Oscar de 2012, donde acompañó al actor durante la ceremonia en la que fue nominado por su papel en Moneyball.
Una vida marcada por la educación y la solidaridad
Más allá de su papel como madre y abuela, Jane Etta Pitt también fue reconocida por su implicación en causas benéficas. En 2009, la familia Pitt realizó una importante donación al hospital St. John’s (actual Mercy Hospital) en Springfield, que permitió la creación del Jane Pitt Pediatric Cancer Center, una unidad especializada en oncología infantil. El centro fue nombrado en su honor, como reconocimiento a su apoyo a la salud infantil y a su compromiso comunitario.
En su mensaje, Sydney Pitt destaca aspectos personales que definen el legado emocional y familiar de su abuela: su creatividad, su humor y su fe. “Ella me enseñó a pintar, a ser fuerte, a liderar con amabilidad, a amar a Jesús a través de todo y a encontrar alegría en las pequeñas cosas… Inventaba juegos solo para hacernos reír. Creía en la justicia y en poner siempre a los demás primero”, escribió la joven.
Una figura clave en la vida de Brad Pitt
Brad Pitt ha mencionado en varias entrevistas el papel crucial que su madre desempeñó durante su infancia y juventud. Criado en un entorno conservador en Missouri, el actor ha contado en distintas ocasiones cómo la educación recibida de sus padres le inculcó una fuerte ética de trabajo y una visión crítica del mundo. A pesar de algunas diferencias ideológicas surgidas con el paso de los años, especialmente en lo referente a temas religiosos y sociales, la relación entre Brad y su madre siempre fue cercana.
El actor aún no se ha pronunciado públicamente sobre la pérdida, y tampoco se han anunciado detalles sobre posibles actos funerarios o conmemorativos.
Jane Etta Pitt deja atrás a su esposo, tres hijos y catorce nietos. Su legado, según han expresado sus familiares, vive en las personas a las que ayudó, educó y acompañó a lo largo de su vida.
