Ana Tijoux es una mujer libre. Al menos todo lo libre que puede ser un ser humano contemporáneo al capitalismo. Nacida en Lille (Francia) en 1977, es hija del exilio y la memoria. Sus padres, represaliados por la dictadura de Pinochet, huyeron de Chile y buscaron en Europa la libertad que el fascismo les arrebató. Tras la caída del régimen, volvieron a la madre patria. Allí, Ana desarrolló una carrera artística basada en el compromiso y la memoria. Ahora, vive en Barcelona. Reconocida como la mejor rapera de la historia en habla hispana por Billboard, Ana Maria Tijoux Merino presenta en ElPlural.com Vida, su último álbum. Una alegoría a la existencia, a la felicidad, a la muerte. Un cántico por lo justo.

P: ¿Qué significa ser hija de exiliados de la dictadura de Pinochet?

R: Siento un gran orgullo por la historia de lucha de mis viejos. Su resiliencia y dignidad. Pero es brutal el precio que tuvieron que pagar. Todos los sistemas dictatoriales dejan destellos de historias diversas y uno es producto de ello. Aquí en España vivisteis más de 40 años de dictadura. Somos hijos de las dictaduras.

R: Es inevitable ese ADN.

R: Al nacer no tienes consciencia de tu contexto, pero el paso del tiempo va forjando tu personalidad, la educación que recibes, los silencios que ocurrieron en tu hogar, los miedos impregnados en las paredes de las casas… Todo eso marca tu forma de ser. También tu trabajo o la mirada que tienes con el mundo.

P: La memoria es imprescindible.

R: La gente con poder puede matar y torturar, pero el legado de las ideas siempre estará vigente. Hay que aprender de la historia para que no se repita, ni siquiera con tu peor enemigo. Es lo que nos diferencia de ellos.

"Españoles y chilenos somos hijos de las dictaduras"

P: Acabas de sacar Vida, tu nuevo álbum tras casi 10 años. Un mensaje en contraposición a toda esa oscuridad.

R: Todos portamos vida. Tenemos un corazón que late fortísimo. Quiero huir de la autoayuda, pero la historia que portamos nos hace olvidar la vitalidad lo que llevamos en el ADN y cómo queremos abordar la vida. Al final, todos nos vamos a morir. Se trata de conocer cómo queremos vivir.

P: Una manera de vivir es Millonaria, canción con la que abres el disco. Alejados de lo material y apostando por los sentimientos.

R: Lamentablemente, las marcas se han instalado en la industria de forma muy inteligente. Sin embargo, todos caemos, mira cómo voy vestida. Lo que más me atrae de Millonaria es el concepto de la sobremesa. Pasa en todas las familias en todo el mundo. Da igual lo que comas o en qué hemisferio habites. La cagadera de risa en la sobremesa y lo que se genera con la comida y su organización natural. Quién lava los platos, quién recoge la mesa. Todas las conversaciones. Pasan tantas cosas durante la comida que van más allá… Y cuando sucede esa magia, me siento millonaria.

P: En Tania haces un homenaje precioso a tu hermana, quien murió de cáncer.

R: Quería resimbolizar la muerte. Tania no está entre nosotros, pero de alguna manera sí. Empieza con una melodía triste, pero acaba arriba. Ella lo querría así.

P: ¿Qué has aprendido al ver la muerte desde tan cerca?

R: Que esto es solo un fokin pedazo de momento y que debemos ser súper agradecidos. Soy muy reflexiva y doy vueltas a todo. Pero luego me digo, ‘Ana, ya está’. Todos nos tomamos demasiado en serio. Tengo mi faceta de rapera y compromiso político pero el 80% del tiempo, estoy con mis tonterías, riéndome, triste y vulnerable. La muerte te enseña que los seres humanos somos un abanico de emociones.

P: ¿Cómo afrontas el paso del tiempo?

R: Haciendo mucho skincare (ríe). No me creo nada, pero llevo más de un año haciendo de todo. Lo estoy disfrutando, pana. Estoy en un momento en el que sé que todo se va a caer igual. Escucho a colegas nuevos que están rapeando brutal y eso me da vitalidad. Hay que romper con el adultocentrismo. Da lo mismo. Somos un colectivo y debemos seguir alimentando esta vaina.

P En el disco hablas con Estela de Carlotto, una madre de la plaza de mayos y haces un homenaje a los desaparecidos por las dictaduras.

R: Cuando me mandó el audio, lloré todo. Hablé con unos amigos, hijos de desaparecidos de la dictadura argentina sobre el concepto de identidad. Hay mucha gente buscándola todavía. En este tema siempre intento tener una visión amplia. Mira España. Desde que estoy aquí he escuchado mucho sobre las fosas comunes. Es importante hablar y resignificar la memoria. Es muy importante poder enterrar a tus muertos, va más allá de creencias.

Hay que romper con el adultocentrismo 

P: El padre de las dictaduras en Latinoamerica fue el neoliberalismo. Chile lo sabe bastante bien. Chicago Boys, Operación Condor, Henry Kissinger...

R: Que ganó un premio Nobel

P: Y Obama.

R: Son contradicciones de la historia.

P: Javier Milei trae todo eso de vuelta. Esa teoría económica que tanto drama produjo ¿Cómo sientes eso en un país tan cercano como Argentina?

R: El pueblo argentino es un pueblo hermano. Nos divide la cordillera, pero nos unen las luchas. Chile, Argentina y Uruguay tienen un gran paralelismo respecto a las dictaduras. Además, la crisis política que vive Argentina sirve para explicar la que vive el mundo. No dudo ni un segundo en que el pueblo argentino, con el ímpetu que tiene, se va a organizar para defender lo que tiene que ver con la vida digna, educación y salud. Al final, el mundo vive una crisis. Como chilena observo a mi pueblo hermano, al que apoyo porque se vienen años duros y necesitan toda nuestra solidaridad.

P: Milei también representa una reacción frente al feminismo.

R: Mi discurso es antiodio pero me alejo de la postal del feminismo blanco. Me representa el feminismo de clase y popular. El que se está cuestionando permanentemente y se aleja de posiciones estáticas. Es una lucha por la vida. Las mujeres siguen siendo asesinadas y golpeadas. También sufren violencia económica y verbal. Hay que romper con los paradigmas de la violencia y para ellos debemos interpelar a la reflexión y el pensamiento crítico. Un personaje como Milei tiene miedo de que haya mujeres empoderadas. Es algo que no conviene al sistema. Somos muchas y se viene una marea de una nueva generación que viene a cuestionar al poder. ¿Por qué un hombre gana más que yo si nos dedicamos a lo mismo? A mí como cantante se me pregunta sobre mis hijos y a los hombres no.

P: ¿Crees que vamos hacia una ruptura?

R: Esa es la idea. Necesito pensar que sí. Si no, me quiebro.

P: Quería preguntarte también por Pablo Chill-E, quien participa en Vida con Dime qué. En España es bastante conocido por sus colaboraciones con Yung Beef o La Zowi.

R: Pablo es un bacán. Una persona muy bella y nos tenemos un cariño especial. Le quiero mucho a él y a su familia. Es chistoso porque soy mayor que su mamá.  La primera vez que lo escuché, me quedé con su flow y eso que el trap no me gusta. Pablo es una persona con mucha conciencia de clase y su mensaje es muy político. Ahí está su colectivo Shishigang y cuya comunidad que forma parte de muchos procesos barriales. Me encantó invitarle. Me llegaron a criticar por ello pero es un artista brutal y así lo siento.

P: ¿Qué más artistas chilenos nos puedes recomendar?

R: Hay mucho rap femenino en Chile: Irina Doom, 22Ruzz, Rayo, Rusica, Flor del Rap, Mistirap… Están saliendo muchas cabras. Hay veces que digo, ‘por qué no nací después’. Además, son súper lindas entre ellas. Se instaló en el colectivo que las mujeres nos teníamos que odiar. Se instaba ello.

P: Al final el hip hop es un gran canalizador de rabia.

R: Mejor rabia que pena.

P: Oye, y lo de ser mejor rapera en habla España, ¿qué?

R: Lo recibo y abrazo, lo agradezco infinitamente. En parte me da pudor y vergüenza. Siento una gran responsabilidad y veo a muchas chicas que están rimando de forma brutal. No creo en los tronos, además. Siento una gran contradicción al respeto. El año que viene pondrán a otra chica y ojalá sea latinoamericana.

P: Hace poco entrevisté a J Noa, qué talento.

R: Rapea increíble y tengo una novedad: va a ser mi telonera en la gira de Estados Unidos. Lo sé desde hace un par de días. Soy muy fan, es bacán. La escuché y dije, ¿what?

P: Me acuerdo de decirle que si se había caído en una marmita de vocabulario.

R: Y qué dicción tiene. Tengo que tomar clases con ella. Es preciosa.

P: ¿Y ahora, qué?

R: Lo que más me gusta de todo esto es tocar en vivo. Y empezamos ya en Madrid. Luego Barcelona, Zaragoza, Estados Unidos, Chile, México.