Casi todos los titulares, espacio y honores se los llevará la muerte de George Michael y poco quedará para un guitarrista tan fantástico, profesional y divertido como Rick Parfitt, el 50% del sonido Status Quo. Contaba 68 años y una infección se lo ha llevado rápida e inmisericorde. No le ha dejado culminar dos de sus proyectos actuales: un primer álbum en solitario y una biografía que se prometía jugosa. Tampoco le ha dejado seguir con sus conciertos acústicos con los que, junto, a la otra cabeza de los Quo, Francis Rossi, estaba recorriendo Inglaterra.

Pagó, en parte, la incomprensión de los más sesudos críticos del rock que se quedaban solo en la superficie de unas canciones rápidas, ligeras y algo ruidosas. Sin embargo los Quo fueron mucho más. Pioneros de un rock blues vacilón; de pocos pero muy sentidos acordes, llamado del “rasca rasca” y unos estribillos imperecederos y tabernarios. ¿Quién no ha tarareado “In The Army Now”, “Down The Dustpipe”, “Whatever You Down” o “Caroline”?

El público si se dio cuenta y son millones de personas de todo el mundo los que les admiran y degustan su buen hacer. Ha muerto un guitarrista divertido pero nos deja sus notas y riffs para enfrentarnos a un 2016 maldito para la música y un 2017 menos atractivo por la ausencia de grandes y heterodoxos artistas.