Hay algunos electrodomésticos más complicados que otros para limpiar. Uno de esos es la tostadora, un aparato perfecto para hacer unas tostadas para el desayuno o para acompañar cualquier comida con tu pan favorito. Este no solo es uno de los más usados sino que también es de los más olvidados a la hora de adecentarlos. Y es que normalmente se suele limpiar por fuera pero no se presta mucha atención a dejarla bien por dentro.
Más allá de sacar la rejilla inferior para sacar las migas que puedan quedar, hay algunos trucos para dejar tu electrodoméstico perfectamente limpio. Si desde ElPlural.com ya te hemos contado cómo limpiar el horno, por ejemplo, ahora te traemos los mejores trucos para dejar tu tostadora por dentro como nueva en pocos minutos y con pocos productos.
Cómo limpiar tu tostadora por dentro
Como decimos, la tostadora es uno de los aparatos del hogar a los que menos atención prestamos a la hora de limpiarlo. Sin embargo, puedes seguir unos sencillos consejos para hacerlo sin invertir muchas horas en el proceso. Para ello lo único que vas a necesitar para ello son siete productos caseros: agua y jabón, un paño, un cepillo de dientes, sal gruesa, bicarbonato de socio y vinagre.
Primero, y muy importante, desenchufa la tostadora para que no haya ningún susto con la corriente. Cuando esté fría (si la acabas de usar), coloca un papel o un trapo sobre la encimera para que puedas recoger mejor las migas. Después, vacía la bandeja inferior de la tostadora, friégala con agua y jabón neutro y sécala muy bien antes de volver a introducirla.
Una vez hecho, dale la vuelta a la tostadora para que caigan las migas y restos de pan que se hayan podido quedado dentro. Quizá solo necesites darle unos cuantos golpecitos en la base para que terminen de salir. A continuación, humedece un cepillo de dientes o uno que sea alargado y finito en agua con un poco de jabón y frota con cuidado las paredes internas del electrodoméstico.
Si ves que hay manchas de grasa o migas adheridas dentro, echa un poco de sal gorda en el cepillo y dale de nuevo por el interior. Esto ayudará a que se desprendan. Tras aplicar la sal, pon tu tostado de nuevo boca abajo para que salga mejor y sacude con cuidado. Una vez te asegures de que no queda nada en el interior, ya estará lista.
Para limpiar el exterior solo tendrás que mezclar un poco de bicarbonato de sodio en agua y frotar con una esponja por toda la superficie. En el caso de que sea de acero inoxidable, mezcla en un spray una parte de vinagre y otra de agua y frota con un paño. Sécalo todo bien y ya tendrás tu tostadora como el primer día.
Con estos sencillos trucos de limpieza podrás dejar tu aparato de cocina perfectamente limpio tanto por fuera como por dentro con pocos minutos y con pocos productos.
