Las tartas son uno de los postres favoritos para la mayoría de las personas. No en vano, qué duda cabe que en un día especial –como puede ser un cumpleaños— la tarta es algo que no puede faltar. Además, existen recetas de tartas muy sencillas que las hacen perfectas para cualquier ocasión y con la que podrás matar el antojo de dulce.

Relacionado La receta de tarta de chocolate con solo dos ingredientes

En este caso, presentamos una receta de tarta de queso sin horno, una opción irresistiblemente cremosa y llena de sabor, que se prepara con ingredientes simples y pasos sencillos. Perfecta para satisfacer antojos dulces en cualquier momento del día, esta receta ofrece una experiencia culinaria que deleitará a todos los comensales.

Ingredientes

  • 200 gramos de galletas tipo María
  • 80 gramos de mantequilla
  • 500 gramos de queso crema
  • 15 gramos de azúcar moreno
  • 150 gramos de azúcar
  • 200 mililitros de nata para montar
  • ½ vasos de leche
  • 2 sobres de preparado para cuajada
  • 1 cucharada de extracto de vainilla
  • Mermelada (de fresa o de frutos rojos son los más habituales)

Relacionado Esta es la receta del bizcocho de yogur: muy rico y fácil

Receta paso a paso de la tarta de queso
Relacionado Prepara en casa la tradicional receta de arnadí valenciano

Receta de tarta de queso sin horno: cómo hacerlo paso a paso

El proceso de elaboración de este postre tan delicioso no te requerirá mucho tiempo y tampoco mucha mañana en la cocina. Para poder conseguir tu tarta, solo tendrás que seguir los siguientes pasos:

  1. Lo primero que tienes que hacer es coger todas las galletas –te recomendamos utilizar las de tipo María, aunque también podrían funcionar las de tipo ‘digestive’—y machacarlas. La forma más sencilla de hacerlo es utilizando una batidora o una trituradora, pero igualmente se puede hacer de forma manual con un tenedor o una cuchara grande, aunque tardarás mucho más tiempo.
  2. Derrite la mantequilla en el microondas –solo tendrás que ponerla a calentar unos segundos—y viértela sobre las galletas ya machacadas. Seguidamente, remueve la mezcla hasta que se forme una pasta. Cuando ya esté lista extiéndela a lo largo de un molde hasta que la base esté totalmente cubierta. Cuando hayas terminado, la reservas y la metes en el frigorífico.
  3. Una vez que la base esté en tu refrigerador, llega el momento de elaborar la mezcla de queso. Este proceso es muy sencillo: tan solo tienes que calentar en un cazo la nata, la leche y la vainilla. Remuévelo mientras que le echas el azúcar hasta que esté totalmente disuelto.
  4. Seguidamente, hay que añadir el queso y volver a mezclar hasta que esté integrado. Calienta toda la mezcla y, cuando hayan pasado al menos cinco minutos, añade la cuajada y remueve para que se disuelva.
  5. Saca la base del frigorífico, vierte toda la mezcla sobre la base de galletas y mantequilla, y de nuevo vuélvelo a meter hasta el frigorífico durante seis horas al menos.
  6. Saca la tarta y echa sobre la superficie de la tarta una mermelada de tu gusto: puede ser del sabor que quieras. Además, te recomendamos que añades como decoración alguna fruta (lo habitual es que sea la misma fruta que la mermelada; por ejemplo, si has utilizado mermelada de frutos rojos, sería mejor decorarlo con frutos rojos.

Síguenos en Whatsapp y recibe las noticias destacadas y las historias más interesantes.