El aceite de oliva es uno de los alimentos más representativos de la cocina española y mediterránea en general. Su sabor, calidad y versatilidad, que permiten elaborar cientos de recetas de manera saludable y deliciosa, son motivo de orgullo nacional y la razón por la que la UNESCO declaró este alimento Patrimonio Inmaterial de la Humanidad en 2014.

Sin embargo, lo que no todo el mundo sabe sobre el aceite de oliva es cómo conservarlo adecuadamente, o cuándo comienza a estropearse y perder sus tan especiales propiedades.

La caducidad del aceite

Existen mitos que sostienen que el aceite no caduca nunca, y son medianamente ciertos, ya que por muchos meses que lleve envasado, su consumo no va a suponer ningún tipo de problema o daño para el organismo. Pese a ello, lo que también es cierto es que conforme pasa el tiempo, va perdiendo propiedades, tales como el sabor, el olor o la textura, que hacen que el tiempo máximo que puede transcurrir para que el producto siga en iguales condiciones desde el envasado hasta el consumo, sea aproximadamente de dos años. A partir de ese momento, el aceite no se vuelve perjudicial ni ‘caduca’, pero sí que sufre un deterioro. 

Cómo conservar adecuadamente el aceite

Para asegurarnos de que estamos conservando de manera correcta el aceite, manteniendo intactas sus propiedades y alargando su vida, es preciso tener en cuenta algunos factores que pueden dañarlo.

Los peores enemigos de este producto son el calor y la luz, lo que explica que las botellas que contienen este ingrediente tengan un color oscuro, con el fin de evitar que la luz afecte al color, olor, sabor y textura de este alimento tan preciado. Por su parte, el calor puede provocar su oxidación, haciendo que se vuelva rancio.

Por el contrario, las temperaturas muy bajas tampoco son beneficiosas y meterlo en la nevera provocará que se cuaje y se vuelva sólido. La mejor forma para conservar el aceite es guardarlo en un lugar oscuro, donde la temperatura no sea ni demasiado elevada ni demasiado baja, como puede ser un armario o una despensa cualquiera.