En agua de borrajas
Las obsesiones del director de ese rotativo de la derecha extrema –por no decir la extrema derecha- le llevaron a narrar a diario los supuestos delitos cometidos por Bono y también a arremeter contra los jueces del Tribunal Supremo y otras instancias judiciales por no condenarlo. Le acusaron de haberse forrado mediante instrumentos ilegales y lo presentaron como una especie de bandido de la política, pero todo quedó en agua de borrajas y algún que otro gato por medio.
Vuelta al escenario
Bono, tras una larga sesión de mutismo, ha vuelto al escenario. Desde la cadena radiofónica de los obispos -con los cuales este dirigente socialista levita y se siente como en el paraíso- lanzó ayer uno de sus habituales bombazos contra su propio partido. No se había alegrado Bono, por lo visto y oído, del primer éxito de los socialistas en la actual etapa, que fue impedir la caída de Andalucía en manos de los populares.
Lenguaje cuartelero para IU
De modo y manera que puso a caer de un burro a Izquierda Unida, utilizando un lenguaje cuartelero y similar al del general Franco. Mientras tanto, Bono exhortaba al PSOE andaluz a que se aliara con Javier Arenas, como, por cierto, el eterno candidato del PP ha venido repitiendo. Y no contento con su nítida fisura respecto a la dirección del PSOE y a la inmensa mayoría de militantes y simpatizantes socialistas, se jactó de sus deseos de que su partido pacte a escala nacional o estatal con la derecha.
El pensamiento único
Mar Moreno, consejera de Presidencia de la Junta de Andalucía, ha replicado a las manifestaciones de Bono, con palabras rotundas y perfectamente entendibles: “Ante esas declaraciones solamente diría una cosa. Quienes desconfían de un acuerdo entre PSOE e IU es que ya han sucumbido al pensamiento único”.
Con sus amigos Ramírez y Rajoy
Quédese con Javier Arenas, señor Bono. O váyase a su casa. Pasee además por los montes y las cañadas con su amigo Pedro J. Ramírez y no se olvide de frecuentar como siempre a obispos y cardenales. El agua bendita le ayudará a llegar al cielo. La derecha ahora le tratará con gran afecto y efusión. Ya está muy cerca de ser uno de los suyos. A lo mejor hasta Rajoy, otro amigo suyo, le nombra Defensor del Pueblo Con los patriotas como usted, señor Bono, la derecha siempre es generosa.
Enric Sopena es director de ELPLURAL.COM