Este nuevo y al parecer excelente Gobierno se ha puesto en marcha a toda velocidad para conseguir lo que no intentó quien, desde la Moncloa, avivó el fuego de los independentistas.

Como decía en su editorial el diario El País, la primera tarea del Ejecutivo de Sánchez es restaurar los destrozos producidos por el Partido Popular. O sea, no olvidaremos nunca los errores de un tal Don Mariano, adiós. Ese señor que fue bendecido por su antecesor, llamado Aznar, y al que luego maltrató de palabra, de forma bastante bestial.     

Cierto es que el PP, antes Alianza Popular, ha protagonizado estafas constantes y trampas por doquier. A partir de ya, se conocerán las sentencias de varias piezas separadas de la trama Gürtel. Las dieciséis del caso Púnica, con el ex secretario del PP de Madrid, Francisco Granados, en primera línea. Los diferentes sumarios del caso Lezo, en donde le principal investigado es Ignacio González, ex presidente popular de la Comunidad de Madrid.

No olvidaremos nunca los errores de un tal Don Mariano

La Razón, ese periódico sin razón, que José María Aznar regaló a su amigote, el periodista Luis Maria Ansón y a quien sustituyó Francisco Maruhenda, ha insertado un larguísimo artículo, titulado “Diálogo envenenado con Torra”. Un texto que atiza el fuego de los choques, en vez de favorecer el apaciguamiento. Mejor sería que unos y otros buscaran la paz, todo lo contrario de lo que se produjo el otro día en la Universidad de Barcelona, con el ataque furibundo de un grupo de radicales independistas.

Pero los que atizan el fuego, podrían leer el último barómetro de GAD3 para ABC que destaca que el PSOE ha pasado de ser la tercera fuerza en el conjunto de España, a situarse en primera posición y a convertirse en referente claro de la izquierda. Que se enteren quienes daban a Sánchez por acabado.