Hechos
Porque la realidad que nos inunda no admite ya componendas de ningún tipo. Ni “programas ocultos”, ni medias verdades, ni el silencio, ni siquiera una porción de insinuaciones. Hay que decirle al pueblo la pura verdad, esa que según la COPE, nos hará libres. ¡A ver si se aplican el cuento!
Tienen que decirnos lo elemental: cuánto debemos, cómo vamos a pagar, de dónde se va a ahorrar, cuáles son los recortes imperiosos y necesarios, quiénes serán los que más paguen. Todo ello claramente, mirando a los ojos a la ciudadanía, sin cortapisas ni cataplasmas.
Realidades
El presidente electo ha optado por guardar escrupulosamente los “tiempos constitucionales”. Está en su derecho, pero no puede olvidar Rajoy que estamos en una situación de extrema excepcionalidad donde al parado, al pobre, al excluido por el desempleo y la miseria no le interesan un quítame ahí esas pajas sino trigo. ¡Se acabó el tiempo de las prédicas!
Más hechos
La Europa merkeliana, que es la que tiene la sartén por el mango, mira de reojo a España después de que haya puesto RIP al país transalpino gobernador, o lo que sea, por ese sujeto inexportable apellidado Berlusconi.
Ahora Mariano no tendrá más remedio que mojarse aunque tenga que poner patas arriba su propio Rajoy style. O lo hace o se lo hacen y de paso se lo llevan a él por delante.
Lo de Ferraz
Siete millones largos de votos cosechados en las peores circunstancias posibles no es para caer en la depresión política. Creo yo. Entre otras cosas, porque el PSOE es una pata tan esencial para el sistema democrático español que si no existiera habría que inventarlo.
Desde luego, las bases socialistas se tienen que inventar un nuevo líder –y a la mayor rapidez posible para controlar al Gobierno de la derecha-, pero al mismo tiempo podrían aprovechar también para refundar ideológicamente el partido, enterrar definitivamente tantos tabúes, enemigos que no lo son, y el resto de clichés que alumbra a la izquierda europea en medio de un mundo radicalmente cambiante y nuevo.
Estoy pidiendo un NUEVO líder con ideas nuevas, renovadas y que salgan esencialmente del corazón y las vísceras de una sociedad que no se ha derechizado pero que quiere, además de ideología, capacidad de gestión y buenos alimentos. Las cosas, lo anterior y esta son demasiado simples pero reales.
Hace tiempo que el pueblo español no comulga con ruedas de molino.
Graciano Palomo es periodista y escritor, director de FUNDALIA y editor de IBERCAMPUS