El reciente estudio del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) refleja que Pedro Sánchez es el hombre que necesitaba el PSOE para acercarse al gobierno de España. Mermados los palos envenenados que metieron en sus ruedas gente de sus  propias filas, parece que su despliegue hacia delante no ha hecho más que comenzar.

Por mucho que algunos insistan en defender posturas ya descartadas por la mayoría de los militantes, ha llegado el momento de que todos remen en la misma dirección. ¿O es que la reconquista del Gobierno de España no era la prioridad?  ¿O eran las luchas internas lo más importante?

Cuando sube la tendencia en intención de voto es fácil el aplauso. Pero para aquellos que depositamos la confianza en Pedro Sánchez, solo nos  queda esperar que esta vez consiga lo que antes le fue imposible.

La política es una maratón y sólo llegan los que consiguen mantenerse en la carrera. Las elecciones primarias en el PSOE, que enfrentaron a cara de perro a Susana Díaz y Pedro Sánchez, descubrieron que la militancia no iba a bajar la guardia aunque algunos palmeros consiguieron hacer mucho ruido. Y ahora toca que unos y otros desde cualquier tribuna defiendan el programa que aprobó el Congreso de este partido hace siete semanas.

La política es una maratón y sólo llegan los que consiguen mantenerse en la carrera.

Además, el último estudio del CIS confirma la pérdida gradual de apoyos que afecta al PP de  Mariano Rajoy Brey. Aunque de momento ha logrado caer del mismo, se desconoce el límite de su resistencia. Al menos queda la esperanza de que en la pugna para sustituir al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez se acerque cada vez más a la locomotora, antes de que el maquinista decida retirarse y abrir paso a un político de refresco.

Si continúa el desgaste del PP, aumentaría la esperanza de que la gran brecha de la desigualdad se estreche, los sueldos míseros se recuperen y la temporalidad se reduzca, mientras los cánticos a una economía boyante y aparentemente sin deudas siguen empujando los precios hacia arriba.